Miércoles 15 de agosto de 2018, p. a10
Tallin, Estonia
Después del gran papel que tuvieron en el Mundial de Rusia 2018, Antoine Griezmann y Luka Modric tendrán en la Supercopa de Europa, este miércoles en Tallin, Estonia, el último gran escaparate donde mostrar sus credenciales para optar al Balón de Oro.
Griezmann levantó la Copa del Mundo como líder de los Bleus, además comandó al Atlético de Madrid que conquistó la Liga de Europa. El jugador galo acaba de disipar rumores sobre una posible marcha a otro equipo y es uno de los futbolistas mejor pagados del planeta.
Modric, en tanto, hizo historia con Croacia al liderar a la selección hasta la final del Mundial de Rusia, que perdió 4-2 ante Francia. El cerebro croata fue elegido el mejor jugador del torneo.
Asimismo, ha sido uno de los líderes del Real Madrid; sin embargo, Modric siempre estuvo a la sombra de Cristiano Ronaldo, aunque la marcha del portugués a la Juventus puede darle un nuevo estatus en el cuadro blanco.
Ambos buscarán compartir el podio, presumiblemente, con Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, cuando a finales de año la revista francesa France Football anuncie el ganador del Balón de Oro 2018.
El club está por encima de todos: Sergio Ramos
El partido enfrenta al Real Madrid de Julen Lopetegui a su primer examen con un plantel en pleno reajuste. Más allá del arquero belga Thibaut Courtois o de la joven promesa brasileña Vinicius Júnior, el club blanco no hizo un fichaje bomba para tapar el hueco que dejó Cristiano. Además, el técnico español no podrá contar por lesión con los defensas Jesús Vallejo y el recién llegado Álvaro Odriozola.
El capitán merengue, Sergio Ramos, habló sobre la ausencia de CR7 y aseguró que el club está por encima de todos. La pérdida de un jugador tan desequilibrante es negativa, pero no por ello se nos van a quitar las ganas de seguir ganando títulos
, indicó.
Los roijiblancos de Diego Simeone, por contra, parecen más fortalecidos. No sólo logró retener a sus pilares, sino que se reforzó con Thomas Lemar, Gelson Martins y Nikola Kalinic para el curso que comienza y que tiene como horizonte la final de la Liga de Campeones que albergará su estadio, el Wanda Metropolitano.
Sin embargo, el entrenador argentino alertó en la previa de que los refuerzos por sí mismos no mejorarán al equipo. La llegada de nuevos futbolistas nos garantiza tener buenas individualidades, pero no un mejor equipo hasta que no se integren en la estructura. Hay que ajustarla para que mejoren las individualidades
, aseguró en rueda de prensa.