El Congreso de la Ciudad de México no reconocerá las basificaciones de trabajadores que se realicen de manera ilegal, advirtió la diputada electa y próxima coordinadora de la bancada de Morena, Ernestina Godoy.

La morenista ofreció ayer una conferencia de prensa en la sede de la Asamblea Legislativa (ALDF) junto con los asambleístas Alfonso Suárez del Real y César Cravioto, quienes detallaron que tienen conocimiento de que se otorgaron 50 plazas sin cumplir con el procedimiento administrativo.

Nadie en Morena está pensando en afectar a ningún trabajador, aseguró Godoy, quien pidió que se haga transparente y legal este proceso, siguiendo los lineamientos existentes, pues de lo contrario será muy dificil respetar acciones ilegales, donde los únicos afectados serán quienes están siendo basificados de manera irregular.

Dijo que es preocupante que en el proceso de basificación no haya información a los agremiados, quienes han denunciado que se busca beneficiar a personal que no cumple con los perfiles laborales adecuados ni con la antigüedad requerida.

Suárez del Real, presidente de la comisión de transición de la séptima Legislatura y el primer Congreso capitalino, refirió que desde el 26 de julio se solicitó informacion del capítulo 1000, Servicios Personales, la cual no ha sido entregada.

Indicó que ante la inconformidad que ha generado esta basificación, se pidió al presidente de la Comisión de Gobierno, Leonel Luna Estrada, se lleve a cabo una reunión donde se informe de este proceso y se dé certeza laboral a los empleados. Esperamos que atienda nuestra solicitud, apuntó.

Llamado a cambiar inercias

Cravioto dijo que los diputados de la Asamblea Legislativa no pueden actuar como si el primero de julio no hubiera pasado nada, y si durante 20 años se actuó para favorecer a algunos grupos, se debe cambiar esta inercia y basificar a quienes tienen un trabajo real.

Al concluir la conferencia se presentó el líder del sindicato mayoritario de los trabajadores de la ALDF, Gaudencio Chávez, quien defendió el otorgamiento de las 50 plazas que, aseguró, se dieron antes de la elección del primero de julio con base en los usos y costumbres de este órgano, donde sus agremiados deciden a qué familiar ingresan.

Precisó que según el procedimiento establecido, al sindicato sólo le correspondió la asignación de 25 plazas y el resto a la oficialía mayor de la ALDF.