Las Zonas Económicas Especiales (ZEE) son un proyecto que no sólo va a subsistir, sino que, incluso, se puede potenciar en el próximo gobierno, que encabezará Andrés Manuel López Obrador, aseguró Gerardo Gutiérrez Candiani, titular de la Autoridad Federal para el Desarrollo de las ZEE En entrevista, confió en que la posible revisión de las reformas estructurales –en particular de la energética– no afectará el desarrollo del proyecto, toda vez que hay coincidencias con el próximo gobierno como el impulso al sur-sureste, además de proyectos estratégicos como el Corredor Transístmico, que incluye la modernización tanto del ferrocarril como de los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos; la creación de pequeñas y medianas empresas y el impulso de las economías locales.

Tenemos grandes visiones que se comparten y yo creo que por eso las ZEE son un programa que no solamente va a subsistir, sino que se puede incluso potencializar, argumentó y adelantó que se buscará mejorar el proyecto.

Existe la posibilidad de tener una zona en Puebla e Hidalgo; también se planteará que no sólo participe el sector industrial, sino que se integre el turístico, sobre todo en los tres estados más pobres. Hay muchas cosas que se pueden incluir, como la parte de refinación; temas como esos los vamos a ir platicando con el equipo de transición que nos asignen y ya ellos, en la visión que tengan, incluirán y perfeccionarán el proyecto de la zonas, señaló.

Además, Gutiérrez Candiani mencionó que se esperará a que las autoridades correspondientes declaren presidente electo a López Obrador y se designe al equipo de transición para buscar un acercamiento con la próxima administración, a fin de mostrarles los avances y retos de las ZEE. Es un proyecto muy social, anclado en abatir la pobreza, en generar inversión y empleo, invertir en capital humano, en generar oportunidades y que esto se traduzca en una mejor vida para todos. Ese plan lo han abrazado todos los sectores sociales y los tres órdenes de gobierno. Estoy muy tranquilo, afirmó.

Así, rechazó que el cambio de administración federal pueda retrasar los procesos de las zonas y previó que para agosto o septiembre se tendrán las primeras autorizaciones para las empresas ancla, las cuales podrán iniciar inversiones de inmediato.