Auge de empresas tecnológicas
Jueves 28 de junio de 2018, p. 24
Únicamente 100 empresas trasnacionales concentran 17 por ciento de las ventas de todo el planeta, 9 por ciento de los activos extranjeros y 13 por ciento de los empleos, de acuerdo con la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y Desarrollo (Unctad, por sus siglas en inglés).
La mayoría de esas compañías son de Estados Unidos, 20 en total, pero en 2012 eran 24. Le siguen Reino Unido, con 14 empresas; Francia, con 12; Alemania y Japón, con 11 cada uno; Suiza, con 4, e Irlanda con 4, mientras que otras 23 se reparten entre otras naciones desarrolladas y sólo 8 pertenecen a países en desarrollo.
Los sectores petrolero y minero dejaron de concentrar el mayor número de empresas en dicho ranking, pues de 19 que sumaban en 2012, el año pasado sólo se incluyeron 13. Fueron desplazadas por las compañías tecnológicas que en sólo 5 años duplicaron su número en el listado al pasar de siete a 15 en el mismo lapso, mientras las farmacéuticas subieron de 10 a 12 y las compañías de telecomunicaciones de seis a siete.
En tanto, las grandes trasnacionales del comercio minorista bajaron su participación de 10 a 6 y las empresas de alimentos, bebidas y tabaco pasaron de 9 a 8.
Según la Unctad, en los pasados 5 años las ventas y el valor agregado de las filiales de las multinacionales creció a una tasa de 1.5 por ciento anual, mientras el empleo aumentó 2.5 por ciento, pero tales cifras contrastan con los incrementos de 9.7 por ciento en ventas, 10.7 por ciento en valor agregado y 7.6 por ciento por año que tuvieron antes de 2010.
En su más reciente informe sobre las inversiones en el mundo que difundió hace unas semanas, el organismo ya advertía que si bien la producción de bienes y servicios, en general, sigue en aumento al igual que las cadenas mundiales de valor, se perdió el ritmo de crecimiento que registraron continuamente durante dos décadas y que parece haber llegado a su tope en 2012. Con ello también bajaron los niveles de inversión extranjera en el mundo (IED), situación que la organización prevé que continuará y afectará a las economías en desarrollo.
En la pasada década, y por primera vez en 30 años, el crecimiento de las cadenas de valor mundiales se detuvo y se revirtió la tendencia que registraba la participación del valor añadido extranjero, lo que es consistente con la desaceleración económica global y la tendencia de la IED, indicó.
Al final de cuentas, el crecimiento de las ventas y el valor agregado en las filiales de las empresas globales es inherente a la producción internacional, cuya desaceleración genera un crecimiento más lento del comercio.
El año pasado los flujos de IED registraron un desplome de 23 por ciento y, según la Unctad, las inversiones han perdido impulso y para este año se prevé sólo una modesta recuperación, lo que representa una preocupación a largo plazo para los políticos de todo el mundo, en especial de países subdesarrollados.