Jueves 28 de junio de 2018, p. a11
Besançon, Francia
Tiene cuatro paredes, una puerta, ventanas, un techo y una chimenea pero es invisible a simple vista. La casa más pequeña del mundo
se mide en micras y extiende los límites de lo infinitamente pequeño.
Es uno de los proyectos estrella del Instituto FEMTO-ST de Besançon, digno heredero de la tradición relojera de esta ciudad.
Ancho: 10 micras. Largo: 20 micras. Alto: 15 micras. Estas son las dimensiones de la microcasa del departamento de nanorrobótica de esa institución.
Esta proeza tecnológica es más pequeña que el diámetro de un vello del brazo
, explicó uno de sus creadores, Jean-Yves Rauch. Extendemos los límites de la precisión y del tamaño de los objetos
, expresó entusiasmado el investigador.
Nadie más en el mundo puede ensamblar esta microcasa, debido a la precisión requerida
, señala Michaël Gauthier, subdirector de FEMTO-ST, asociado al Centro Nacional de Investigación Científica.
La microcasa fue construida
en laboratorio, en una cámara de vacío de 60 centímetros cúbicos. En el interior hay un microscopio electrónico capaz de aumentar un millón de veces una imagen, un cañón de iones que hace de soplete y un robot para mover los objetos y las partes de la casa.
más pequeña que el diámetro de un vello del brazo, explicó uno de sus creadores.Foto Afp
Los investigadores controlan el robot y el cañón de iones por medio de una computadora ubicada junto a la cámara de vacío. El cañón de iones corta el patrón de la casa sobre una membrana de vidrio de 1.2 micras de espesor.
Muros, techo y chimenea completan el edificio.
Esta innovación fue ideada y realizada por el centro de investigación para demostrar el poder
de su nuevo sistema de microrrobótica, la plataforma Robotex (Microrrobotex), que supera los límites de las nanotecnologías ópticas mediante la combinación de varias tecnologías existentes.
Nuestra casa tiene todas las capacidades técnicas y tecnológicas; es revolucionaria en comparación con lo que se hace hoy en términos de precisión y ensamblaje robótico
, afirmó Jean-Yves Rauch.
Con este avance, fibras ópticas delgadas como el cabello pueden insertarse en lugares inaccesibles como los motores a reacción y los vasos sanguíneos para detectar niveles de radiación o moléculas virales
, señalaron investigadores.