Las gestiones panistas que en la década reciente han gobernado la delegación Benito Juárez han vivido una luna de miel con la corrupción, afirmó Fadlala Akabani, candidato de Morena a encabezar esta demarcación.

En entrevista con este diario puntualizó que a esos jefes delegacionales se les olvidó gobernar para la gente, y sólo se enfocaron en enriquecerse, por eso se deterioró la calidad de vida de los habitantes.

Hoy día, dijo, esta delegación no sólo enfrenta deficiencias en servicios como los de agua y drenaje, sino un auge inmobiliario, y lo que nunca se había dado: ocupa los primeros sitios en cuanto a robos a casa-habitación, a negocios y de autopartes. La Benito Juárez ya no es el mejor lugar para vivir, como fue hace años.

Respecto de las 12 mil familias en condición de pobreza, aseguró que su situación no ha mejorado, y la clase media está subyugada por las decisiones que tomaron los gobiernos panistas en esta delegación, y del PRI a escala federal.

Definió como su primer prioridad atacar el problema de la inseguridad con la aplicación de esquemas de cuadrantes, como los que aplicó Andrés Manuel López Obrador cuando fue jefe de Gobierno de esta capital. Subrayó que se contratarán más policías para abatir el índice delictivo y se rescatarán los módulos de seguridad, además de que se comprarán 100 patrullas en los primeros 100 días, pero, sobre todo, supervisaremos el desempeño de la policía preventiva.

–Mientras se deterioraba esta delegación, como dice, ¿qué hacían los delegados?

–Estaban metidos en su corrupción, estaban en sus laureles de corrupción; no les importó nada. Cancelaron los miércoles ciudadanos, cancelaron las visitas a las colonias... ellos están en su luna de miel con la corrupción, por eso la indolencia, la falta de vocación de servicio.

–¿Los sectores conservadores de Benito Juárez seguirían votando por un panista?

–Cada día se está dando cuenta esa gente de que no deben votar por tradición ni por una cuestión de identidad ideológica, sino que tienen que votar por el mejor candidato, que soy yo.

–Pero son grupos de arraigadas posturas tradicionalistas...

–Hay un rompimiento en esta situación, porque los vecinos ya ven lastimada su calidad de vida y cuando ya les toca a ellos, cuando sufren el impacto de los malos gobiernos, ya deciden cambiar.

–¿Lo ven de izquierda esas familias conservadoras o de derecha en un partido de izquierda?

–La geometría política ya no pesa tanto cuando se trata de gobiernos locales, sino más bien pesa el que garantice quién le va a dar la mejor calidad de vida y seguridad.