El candidato del Partido Revolucionario Institucional a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, Mikel Arriola, se reunió con transportistas y comerciantes de la Central de Abasto, donde se comprometió a acabar con la ola de asaltos, así como a transparentar y auditar los millonarios recursos que se generan en este mercado , que se ha convertido en la caja chica de las autoridades capitalinas.

Invitado por el comité técnico del fideicomiso de la Central de Abasto, el aspirante priísta dijo que será prioridad de su gobierno sancionar a quienes hayan malversado los recursos de la Central de Abasto, y se recuperarán para financiar la operación de este mercado, que hoy requiere de financiamiento para seguridad, infraestructura y ordenamiento vial.

Arriola reiteró su compromiso de instalar un millón de cámaras y alumbrado en todas las calles, e instalar un centro de comando en este centro mayorista, para reducir el índice de asaltos y tener mayor capacidad de respuesta ante cualquier ilícito.

Además de transparentar los recursos que obtiene el gobierno capitalino de este espacio comercial, ofreció suscribir un convenio para otorgar seguridad social a los locatarios, promover vales que puedan ser canjeables en los diferentes locales, y regular el área de ambulantes.

▲ El candidato priísta a jefe de Gobierno de la capital del país, Mikel Arriola Peñalosa, sostuvo un encuentro con locatarios y transportistas de la Central de Abasto, ante quienes se comprometió a poner fin a la inseguridad en ese centro mayorista.Foto Marco Peláez

Denuncian opacidad

Los representantes de los comerciantes se quejaron de la inseguridad, la falta de mantenimiento, las altas cuotas que se cobran, el desabasto de agua y la opacidad en los recursos autogenerados.

Todos hemos tenido culpa del abandono de la central, porque cada quien trabaja para sus arcas, pero los autogenerados, que son millones de pesos, no sabemos dónde están, expresaron, y exigieron también circuitos seguros para los transportistas y los clientes.

Al lugar llegó un grupo de comerciantes que gritó y levantó pancartas con consignas en contra del PRI, lo cual el aspirante priísta atribuyó a sus oponentes políticos de Morena y el sol azteca, que al cierre de la contienda se han puesto nerviosos, pero, aseguró: No me van a amedrentar y continuaré yendo a lugares que jamás pensaron que iría.