Los ciudadanos originarios de Venezuela ocupan el primer sitio en la lista de refugiados en México con permiso de permanecer en el país por, entre otras causas, razones humanitarias o asilo político.

Los sudamericanos en referencia desbancaron a los centroamericanos en cuanto a número de personas admitidas por esa figura y específicamente con base en los artículos 52 y 54 de la Ley de Migración y su reglamento.

La norma indica, en ese punto, los requisitos y circunstancias que debe acreditar el extranjero para ser admitido como residente temporal o permanente, así como los parámetros específicos de índole político, familiar y de derechos humanos, entre otras causas.

La Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación (SG) reporta para el periodo de enero a marzo de este año la existencia de 596 beneficiarios de refugio, de los cuales 71.1 por ciento son venezolanos (424) y en un lejano segundo lugar están los salvadoreños, con 87 casos, equivalente a 14.6 por ciento.

Le siguen los ciudadanos originarios de Honduras, con 63 casos (10.6 por ciento), y 22 (3.7 por ciento) son de otro país.

Si la comparación se hace con respecto del primer trimestre de 2017, el aumento de autorizaciones de refugio en la modalidad en referencia también es sustancial. En ese periodo del año pasado se registraron 465 casos, y El Salvador encabezaba la lista, con 157. Le seguían los hondureños, con 148, y los venezolanos, con 136.

Ahora la suma es de 596, según la estadística de la SG, que precisa que esa clasificación de refugio incluye a extranjeros con tarjeta de residente permanente documentados por primera vez, en términos de los artículos 52 y 54, fracción I, de la Ley de Migración, y del artículo 139, fracción I, de su reglamento.

Las cifras generales, que incluyen todas las causales de protección del Estado mexicano a migrantes, están a cargo de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), instancia que cesó la difusión de dicha estadística y la más reciente que está disponible es la correspondiente a diciembre de 2017.

Seis meses después no se han dado a conocer los números totales respecto de lo que ha ocurrido en 2018.

Funcionarios de la SG aducen que las oficinas de la Comar resultaron dañadas por el sismo de septiembre pasado y que debieron cambiarse de sede.

Los extranjeros solicitantes de refugio también fueron afectados por la suspensión temporal de la atención, indicaron grupos civiles.

La ley indica que el trámite y su resolución no deben pasar de 45 días hábiles, pero el 30 de octubre se publicó en el Diario Oficial de la Federación un acuerdo de suspensión de términos y plazos del procedimiento de reconocimiento de la condición de refugiado.

En diciembre pasado, la Comar dio cuenta de 14 mil 596 solicitudes de refugio recibidas en 2017: de éstas, 4 mil 272 eran de hondureños, 4 mil 42 de venezolanos y 3 mil 708 de salvadoreños, por mencionar los grupos más numerosos.

En ese momento 4 mil 475 personas habían concluido el procedimiento y mil 907 fueron reconocidos, así como 918 beneficiarios de protección complementaria (que pueden quedarse en el país), así como mil 650 rechazados. Sin embargo, había hace seis meses 7 mil 719 casos en trámite, cuya situación se desconoce hasta el momento.