En contadas ocasiones ha tenido más de un mitin al día
Domingo 3 de junio de 2018, p. 6
Colocado en segundo lugar en las preferencias electorales, de acuerdo con diversas encuestas, Ricardo Anaya, candidato presidencial de la coalición por México al Frente, integrada por PAN, PRD y MC, ha privilegiado una campaña al aire, es decir, basada más en promocionales publicitarios, declaraciones a medios de comunicación y entrevistas concertadas con estaciones de radio y canales de televisión. De ahí que en muchas ocasiones sólo tenga un evento público al día, algo inusual en una contienda por la silla presidencial.
De sus giras por el país se recuerda que sólo cuando empezó la etapa proselitista tuvo más de dos mítines o reuniones abiertas a la prensa. Puebla es el único estado en el que ha tenido hasta cinco actos en una jornada, pero en el resto de las entidades sus visitas se caracterizan por una sola actividad y en algunas ocasiones dos.
Según sus asesores, eso se debe a que tiene encuentros privados con empresarios u organizaciones sociales, de las que poco o nada ha trascendido.
La poca actividad pública acostumbrada en la usanza de una campaña presidencial de Anaya, contrasta con la que tiene Andrés Manuel López Obrador, aspirante de la coalición Juntos Haremos Historia, quien todos los días tiene de tres a cuatro mítines, además de los encuentros privados con diversos sectores de la sociedad.
Los colaboradores de Anaya señalan que la campaña está enfocada en la difusión de su imagen en los medios de comunicación tradicionales y en Internet, donde se puede ver que su página es muy escueta y las notas de sus actos son breves resúmenes y con poco material gráfico, algo que este medio permite con holgura. Por eso, continuamente se le puede escuchar o ver en una entrevista para la radio y la televisión o con comentarios en la redes sociales. En las últimas dos semanas se ha presentado hasta en programas de espectáculos para difundir algunas propuestas, ya que la mayor parte del tiempo ataca al abanderado de Morena.
Pese a su exposición mediática, Anaya no ha logrado subir en las preferencias electorales. Sus consejeros estiman que eso se debe a que no ha logrado conectarse
con la ciudadanía y a que no tiene empatía con la gente.
En estas circunstancias, reconocen que no será fácil alcanzar al puntero en las encuestas en los 27 días restantes de la campaña, si bien no pierden la esperanza de lograr el triunfo el 1o de julio.