Ante las denuncias de afectaciones ambientales y arqueológicas por la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (NAICM), que hicieron habitantes de las zonas aledañas a este sitio, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) se deslindó de los trabajos de explotación de minerales que se usan en su cimentación y dijo que son responsabilidad del Grupo Aeroportuario (GACM).

Pobladores de 12 comunidades, junto con el presidente de la Comisión especial de seguimiento a la construcción del proyecto en la Cámara de Diputados, Rafael Hernández Soriano, denunciaron el jueves pasado la explotación de cerros y minas, donde se extrae principalmente tezontle y basalto, además de señalar que dichas excavaciones han generado toneladas de lodo.

Tras la protesta que realizaron afuera de las oficinas del titular de la SCT, Gerardo Ruiz Esparza, la dependencia federal indicó que la empresa responsable de la construcción es el GACM, que verifica que la procedencia de todos los materiales cumpla con la norma y autorizaciones que para el efecto emiten las autoridades en materia ambiental.

En un comunicado, reiteró que el Grupo Aeroportuario, por medio de la residencia y supervisión de las obras, lleva a cabo la verificación y seguimiento del cumplimiento de los permisos y autorizaciones respectivas. El ingreso y salida de materiales de la obra del NACIM es verificado por GACM, las contratistas y los supervisores del proyecto, indicó.

Durante la protesta que realizó el diputado federal, el secretario particular del titular de la SCT se comprometió a gestionar una gira de supervisión encabezada por Ruiz Esparza en los puntos donde se denunciaron la presuntas irregularidades.