El impacto alcanzará 2 mil millones de dólares
Viernes 1º de junio de 2018, p. 23
Ante las tarifas impuestas por Estados Unidos a las importaciones de aluminio y acero, el gobierno mexicano y la iniciativa privada acordaron buscar nuevos mercados para esas industrias con el fin disminuir los efectos negativos, pues en el caso del acero el impacto alcanzará los 2 mil millones de dólares.
En entrevista telefónica, Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), sostuvo que el anuncio de Washington de gravar las importaciones del acero y el aluminio –25 y 10 por ciento, respectivamente– preocupa al sector privado, pero la posición de México es seguir firme en su postura ante un escenario de posible cierre del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
A México le interesa un acuerdo, pero no podemos con un desbalance de condiciones de competitividad. Es por eso que México no puede aceptar las condiciones que Estados Unidos ha puesto sobre la mesa
, dijo.
Comentó que el sector que encabeza respalda las medidas espejo anunciadas por el gobierno mexicano. Agregó que si Estados Unidos arrecia las acciones, el gobierno mexicano hará lo mismo y si retira las acciones, México responderá de la misma forma.
Indicó que en una conversación ayer con los titulares de las secretarías de Economía y Relaciones Exteriores, Ildefonso Guajardo (desde París) y Luis Videgaray, respectivamente, se acordó buscar otros mercados aprovechando los tratados de Libre Comercio con la Unión Europea (TLCUEM), Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTTP) y Alianza del Pacífico, para mitigar los efectos de las medidas estadunidenses.
Las cámaras nacionales de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero) y de la Industria del Aluminio (Canalum) expresaron su rechazo, preocupación y tristeza por las medidas.
Ambos organismos expresaron por separado que México debe adoptar medidas espejo a los mismos productos sin excepción alguna, pues una decisión menor sería inaceptable
.
Coincidieron en que los aranceles no tienen sentido y no contribuyen a un clima de construcción de la región de Norteamérica, pues México no representa una amenaza para la seguridad nacional estadunidense.
En un comunicado, la Canacero consideró que los aranceles representarán para el sector siderúrgico de México un impacto de 2 mil millones de dólares anuales. Pero resaltó que en los dos años anteriores Estados Unidos mantiene un superávit en siderurgia con México de 3.6 billones de dólares, por lo que las medidas espejo afectarán a la industria de aquel país.
Ramón Beltrán Arellano, presidente de la Canalum, sostuvo que los únicos afectados en esta guerra comercial son los consumidores finales, pues México es importador de aluminio, ya que no cuenta con minas de bauxita –mineral del que se obtiene el metal– y por tanto no produce la materia prima.