Ginebra. China calificó ayer de infundadas ante el panel de resolución de disputas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) las acusaciones de Estados Unidos de que Pekín obligó a compañías a entregar información de tecnología a cambio de hacer negocios en la nación asiática. No hay transferencia de tecnología forzada en China, dijo el embajador chino Zhang Xiangchen en la reunión. Los principios de las consideraciones comerciales, la libertad contractual y la competencia del mercado son observados de manera plena en estas transacciones, enfatizó. En abril, la administración de Donald Trump propuso aranceles a una lista de productos chinos por 50 mil millones de dólares con base en una investigación de la sección 301 por presuntas prácticas en propiedad intelectual y transferencia de tecnología. El embajador chino explicó que esa investigación no proporciona ninguna evidencia de que la ley china obligue a las compañías extranjeras a transferir tecnología a los socios chinos, ni da pruebas sobre la presunta violación del compromiso de Pekín con la OMC de no usar esa transferencia como requisito para tener acceso a su mercado. El argumento estadunidense implica una presunción de culpabilidad y algunas acusaciones constituyen pura especulación, sentenció.