El próximo 28 de mayo habitantes de la comunidad de San Pedro Tlanixco, estado de México, acudirán al Tribunal Superior de Justicia de la entidad para presentar una apelación contra la sentencia de 50 años de cárcel emitida contra seis pobladores de la localidad acusados del asesinato de un empresario de un poblado vecino.

Antonio Lara, director del Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero, recordó que desde hace más de 30 años la comunidad nahua de San Pedro Tlanixco ha estado en conflicto con una empresa floricultora asentada en el municipio aledaño de Tenango del Valle, por el uso que la compañía da al agua del río Texcaltenco.

En 2003, Alejandro Isaak Basso, empresario de Tenango, anunció que acudiría a San Pedro Tlanixco, cuyos habitantes hicieron sonar las campanas de la iglesia del pueblo para convocar a la gente.

Ese hecho bastó para que seis habitantes de San Pedro fueran acusados de asesinato. Según los pobladores, el funcionario murió al caer en forma accidental a una barranca al huir, luego de un altercado con los pobladores; sin embargo, las autoridades consideraron que los vecinos hicieron tañer las campanas para convocar a un linchamiento.

La defensa de los seis pobladores de Tlanixco considera que la pena de 50 años de prisión contra los acusados está basada en motivaciones racistas contra los usos y costumbres de la localidad.

Los inconformes acudirán a impugnar la sentencia acompañados de Miguel Álvarez Gándara, ganador del Premio Nacional de Derechos Humanos 2017, y de Ignacio de Valle, dirigente del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra.