San Francisco.

Moses Farrow, hijo adoptivo de Woody Allen y la actriz Mia Farrow, defendió al director de cine ante las acusaciones de abusos sexuales formuladas por su hermana Dylan Farrow.

En una entrada de blog, el terapeuta y fotógrafo de 40 años, acusó a Mia Farrow de tener un comportamiento abusivo cuando él y sus hermanos eran niños.

Soy una persona muy reservada y no estoy nada interesado en la atención pública, escribió Farrow en una entrada de su blog, A son speaks out. Pero dados los ataques increiblemente inexactos y engañosos a mi padre, Woody Allen, creo que no puedo seguir en silencio mientras continúa siendo condenado por un crimen que no cometió, agregó el fotógrafo y terapeuta de 40 años.

Moses Farrow dijo que su madre les pegaba a menudo a él y a sus hermanos, Ronan y Dylan, y que vivían atemorizados por ella, a la que también acusó de lavar el cerebro de sus hijos.

Woody Allen, de 82 años, ha negado repetidas veces las acusaciones de abusos sexuales de su hija adoptiva refiriéndose a ellas como falsas e ignominiosas.

Dylan Farrow asegura que Allen abusó de ella en un ático en su casa de Connecticut cuando tenía siete años. Las primeras acusaciones llegaron cuando Allen se separó de Mia Farrow en 1992.

Pese al inicio de una investigación en Connecticut, nunca se llevó a Allen a juicio. Tras la ruptura, el cineasta comenzó un romance con la hija adoptiva de Mia Farrow, Soon-Yi Previn, quien entonces tenía unos 20 años. Más tarde la pareja se casó.