El pabellón de México en la edición 16 de la Muestra Internacional de Arquitectura de la Bienal de Venecia 2018 fue inaugurado el miércoles con la propuesta Echoes of a Land (Ecos de una tierra). Veintiún obras articulan la exposición y evidencian la morfología de un territorio desafiante para la arquitectura.

Un conjunto de murales ofrece un atlas sobre la topografía, la batimetría y la complejidad del territorio mexicano desde el quehacer arquitectónico.

La selección de esos trabajos es producto de la convocatoria publicada en agosto de 2017, en la que ingresaron 213 proyectos de 15 estados.

En un comunicado, Lidia Camacho, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), informó que la presentación se integra por trabajos que “celebran la calidad y generosidad espacial en la arquitectura mexicana, sin importar su escala ni condición pública, privada, exclusiva o restringida.

“En seis años –prosiguió la funcionaria– la participación mexicana ha abierto una ventana para difundir, compartir y promover sus búsquedas y logros.”

Carga geográfica, imaginaria y cultural

La curaduría, a cargo de Gabriela Etchegaray, destaca la carga geográfica, imaginaria y cultural de esa disciplina.

También retoma el lenguaje del arte muralista como pieza esencial en la historia de México para reactivar los procesos de reconstrucción e identidades colectivas.

Las catástrofes de los años recientes patentizan un papel ético más amplio en la arquitectura.

Con 37 años y 16 ediciones, la Bienal de Venecia es la más longeva y relevante para la arquitectura mundial y es la cuarta participación oficial de México.

Esta vez suma 65 pabellones nacionales; además, acuden 71 invitados, entre los que figura la mexicana Rozana Montiel.

El Pabellón de México concluirá exhibición el 25 de noviembre en el Antiguo Complejo Naval y Militar conocido como El Arsenal en Venecia.