Personal de PGV lucha por cerrar último pozo
Miércoles 23 de mayo de 2018, p. 33
Honolulú.
La lava expulsada por el volcán Kilauea amenaza las instalaciones del complejo Puno Geothermal Venture (PGV), una planta de energía geotérmica que proporciona alrededor de 25.0 por ciento de la energía en la Isla Grande de Hawái. Desde temprano este martes, trabajadores de la planta, ubicada en la zona de ruptura del este del volcán Kilauea, luchan por cerrar el último pozo en la instalación geotérmica, ante la amenaza de que llegue la lava.
En un comunicado, la Defensa Civil del Condado de Hawái (HCCD) informó ayer que las autoridades están realizando esfuerzos para evitar la llegada de la lava a la planta y garantizar la seguridad de la comunidad. “Autoridades del condado, el estado y federales colaboran estrechamente para monitorear la situación y garantizar la seguridad de las comunidades circundantes”, destacó la declaración.
Por fortuna, agregó, el flujo de lava se detuvo en una cresta cerca de la planta de PGV, pero como han demostrado los eventos de las últimas dos semanas, el monte Kilauea se encuentra en un estado volátil en extremo.
Según medios estadunidenses, la fisura 22 de la lava logró llegar a 250 metros de la plataforma de pozo de las instalaciones de la planta geotérmica, cerradas desde el 3 de mayo, un día antes de que el Kilauea entrara en erupción.
Para proteger las instalaciones de la PGV, los trabajadores bombearon agua fría a los 11 pozos antes de cubrirlos con tapones de hierro y eliminaron 60 mil galones (unos 227 mil 124 litros) de pentano, líquido muy inflamable y nocivo que se usa en la planta.
Los pozos en la planta de PGV tienen de mil 830 a 2 mil 440 metros de profundidad, por los que sale el vapor caliente y el agua, que impulsan las turbinas para producir electricidad.
El HCCD destacó en su declaración que la fisura 22 está produciendo la mayor parte de la lava del volcán, que alimenta los flujos en la Isla Grande de Hawái, por lo que la situación cerca de la planta de energía sigue siendo mala.
El Observatorio Volcánico de Hawái reportó ayer que la erupción mas reciente en la cumbre del volcán ocurrió el lunes a las 17:51 horas locales, aunque la lava se sigue vertiendo al océano Pacífico, a sólo cinco kilómetros al este de la planta, según la cadena Hawaii News Now.
La caída de lava en el mar produce nubes nocivas de vapores ácidos y partículas similares al vidrio, que en conjunto forman una sustancia tóxica llamada laze
, acrónimo de las palabras en inglés lava y calina, que provoca graves afectaciones en ojos, piel y pulmones si es inhalada.