Guadalajara, Jal.

Carlos Lomelí, del partido Morena, fue el principal blanco de los ataques lanzados durante el primero de los tres debates entre los candidatos a la gubernatura de Jalisco, efectuado la noche del domingo.

Aunque Lomelí es segundo en las encuestas, muy lejos del candidato de Movimiento Ciudadano, Enrique Alfaro, en él se centró la artillería de los otros seis candidatos, en particular del perredista Carlos Orozco y del propio Alfaro.

Este último fue quien sumó más menciones desfavorables (18), pero el representante de Morena fue atacado al menos en 13 ocasiones y fue el único a quien todos los adversarios le hicieron señalamientos negativos.

Alfaro, alcalde con licencia de Guadalajara, está al frente en las encuestas, con 50 por ciento, seguido de Carlos Lomelí, con 30 por ciento, quien supera por escaso margen al priísta Miguel Castro.

El debate se realizó en las instalaciones del canal de televisión de la Universidad de Guadalajara (UdeG) y participaron además los candidatos del Partido Acción Nacional, Miguel Ángel Martínez; del Partido Verde Ecologista de México, Salvador Cosío; del Partido Nueva Alianza, Martha Rosa Araiza, y del Partido de la Revolución Democrática, Carlos Orozco.

Enrique Alfaro amenazó a Lomelí con hacer público el contenido de una memoria USB que exhibió: un supuesto contrato que empresas del candidato de Morena habrían firmado con el Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco.

Va a tener que contestar la información que tenemos aquí respecto a los contratos por 500 millones de pesos que sus empresas hicieron con Pensiones del Estado y sobre las irregularidades que vamos a demostrar y, por supuesto, van a generar denuncias penales, dijo Alfaro a Lomelí. Fue mera finta, pues no reveló documento alguno.

Me gustaría saber si Enrique Alfaro va a traicionar a Ricardo Anaya como traicionó a (el candidato presidencial de Morena) Andrés Manuel López Obrador, y como hoy, por hambre y sed de poder, traiciona su palabra y pacta con Raúl Padilla (ex rector de la UdeG y líder político del grupo Universidad), el hombre que hace 30 años traicionó y expulsó de la Universidad de Guadalajara a su padre, Enrique Alfaro Anguiano, respondió Lomelí.

El candidato de Morena evitó contestar la mayor parte de las acusaciones y en cada caso remitió al público a su página de Internet, en la que, afirmó, se daría respuesta puntual a cada duda y ataque de “esta guerra sucia”.

Entre otras propuestas, los candidatos ofrecieron ampliar las rutas del tren eléctrico urbano de Guadalajara, someter a pruebas toxicológicas de polígrafo y siquiátricas a los aspirantes a la gubernatura, así como colocar brazaletes electrónicos a hombres que hayan sido denunciados por violencia contra mujeres, para prevenir feminicidios.