Las protestas, imparables; continúan en al menos 10 ciudades de todo el país
No tenemos por qué reprimir a la población que se manifiesta
, subraya el vocero de los militares
La Conferencia Episcopal busca fijar fecha para el diálogo que ponga fin a la crisis
Domingo 13 de mayo de 2018, p. 20
Managua.
Las protestas y bloqueos carreteros contra el gobierno del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, continuaron ayer en al menos 10 ciudades de las 17 provincias del país, tras dos noches marcadas por actos de vandalismo y enfrentamientos violentos, al tiempo que el ejército tomó distancia del mandatario al afirmar que no reprimirá
las manifestaciones antigubernamentales.
El episcopado, en tanto, busca fijar fecha para el diálogo con Ortega para poner fin a la crisis, que ya dejó decenas de muertos, cientos de heridos y detenidos y varios desaparecidos.
Por la madrugada se reportaron ataques contra sedes del partido gobernante, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), en las ciudades de Chinandega, Granada, La Concepción y León.
En Matagalpa, Estelí y el histórico barrio indígena de Monimbó de Masaya, antiguos enclaves de la lucha sandinista contra la dictadura de los Somoza (1934-1979), los manifestantes levantaron barricadas de más de un metro de altura.
En Chontales, más de mil campesinos bloquearon la circulación vehicular, lo que afectó a camiones que trasladan alimentos a los mercados de la capital. Hubo manifestaciones similares en Rivas.
En el famoso Mercado Oriental de esta capital, considerado el mayor centro mercantil del país, los comerciantes levantaron barricadas con adoquines para defenderse de saqueadores, quienes el viernes intentaron atacar los negocios.
Además, taxistas managüenses comenzaron un paro y bloquearon con sus automóviles calles y avenidas, lo que provocó caos vehicular. Las personas tuvieron que llegar a sus trabajos caminando.
Simpatizantes del FSLN y empleados públicos gritaron consignas y ondearon banderas de Nicaragua y la rojinegra del Frente Sandinista en favor de Ortega en la rotonda Hugo Chávez, ubicada en el antiguo centro de Managua.
Estudiantes universitarios, protagonistas de las movilizaciones, niegan haber cometido actos de vandalismo. Culpan a la agrupación pro gubernamental Juventud Sandinista de causar disturbios para justificar la represión policial del jueves pasado, que dejó tres muertos por impacto de bala.
En este contexto, el coronel Manuel Guevara, vocero del ejército, indicó: No tenemos por qué reprimir a la población que se manifiesta en las calles. Creemos que el diálogo es la solución
. Subrayó que la posición de las fuerzas armadas en esta crisis, que lleva casi un mes, está apegada al mandato constitucional de “proteger objetivos vitales para el funcionamiento del país.
Rechazamos informaciones manipuladas que nos quieren hacer aparecer reprimiendo las protestas
, enfatizó.
La jornada de protestas se produce en medio de los esfuerzos que realiza la Conferencia Episcopal por calmar los ánimos y convocar a un diálogo propuesto por el gobierno. La crisis comenzó el 17 de abril con una protesta de estudiantes contra una reforma al seguro social, la cual aumentaba las aportaciones de trabajadores y empresas.