Buenos Aires.

Un día después de las marchas y ollas populares por el 1° de mayo y de protestas y demandas contra el gobierno de Mauricio Macri, el dólar se disparó a 21.52 pesos y obligó a intervenir otra vez más al Banco Central (BC) poniendo a la venta 500 millones de dólares, agravando la crisis, mientras la oposición logró en la Comisión de Presupuesto y Hacienda de Diputados el dictamen para tratar el proyecto que retrotrae las tarifas a diciembre de 2017 entre otras medidas y la figura del mandatario va en picada al registrar 60 por ciento de opinión negativa.

El jefe de gabinete Marcos Peña, advirtió que Macri vetará si se logra mayoría para el proyecto de las tarifas que además de retrotraerse, solo podrán ser actualizadas de con acuerdo con los salarios y una rebaja del IVA de 50 por ciento para la población en general y para las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes), ya que han cerrado unas seis mil de estas.

La subida del dólar saltó cinco por ciento este día, tocando un nuevo máximo histórico en agencias y bancos a pesar de la intervención del BC y llevará inevitablemente al aumento del combustible y otros que volverán insostenible la situación se advirtió hoy aquí entre los rumores sobre un posible estallido social, ante la extrema presión del gobierno y la imposibilidad real de pagar las tarifas, aumentadas entre mil y mil 500 por ciento.

En el Congreso el titular del bloque de diputados del Frente Para la Victoria- Partidos Justicialista (FpV-PJ) Agustín Rossi, advirtió que “la gente no aguanta más y que se ha llegado a un límite, mientras que el diputado del mismo bloque y ex ministro de Economía, Axel Kicillof, reclamó al gobierno que deje atrás las maniobras dilatorias y que los diputados quieren dejar congeladas las tarifas y a partir de ese momento poner un criterio de actualización que no pueda superar el coeficiente de variación salarial, al llamar a aprobar un proyecto que escuche la perspectiva de los hogares, de los trabajadores, de los jubilados y de las Pymes.

Primero de Mayo argentino-brasileño

Lula libre fue la demanda de miles de trabajadores, artistas e intelectuales argentinos este 1° de mayo tan especial en Buenos Aires con la presencia de la presidenta legítima (así le llamaron todos) Dilma Rousseff, quien se reunió con la ex presidenta y actual senadora Cristina Ferández de Kirchner en esta capital, entre otras actividades.

Rousseff presentó en la Feria del Libro, junto a personalidades locales y extranjeras el libro La verdad vencerá del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, detenido ilegalmente en Curitiba en el sur de Brasil, ante casi mil personas lo que resultó la jornada más importante hasta ahora en ese evento.

Lula inocente, Lula libre, fue el comienzo de la presentación de Rousseff, mientras el público reclamaba la libertad del preso político del régimen de Michel Temer.

Rousseff explicó la situación en Brasil y lo que significa la prisión ilegítima de Lula. Este golpe es muy particular: lo hacen en nombre de la ley, pero no hacen más que violar la ley. El golpe transformó la ley en la mayor arma de destrucción civil. Destrucción de ciudadanía, de derechos, de libertades. Una prueba de que el golpe no sólo es ilegal, sino también ilegítimo es que luego de de este suceso, los únicos que crecimos políticamente fuimos nosotros, las fuerzas progresistas que querían destruir.

Advirtió que como no logran derrotar a los gobiernos progresistas en las elecciones, crean otros mecanismos, usan la ley para la ilegalidad y en el caso de Brasil le temen a Lula, temen lo que hizo, temen lo que puede hacer, lo que habla, lo que piensa. Lula no tiene miedo, ellos le tienen miedo a Lula. Lula debe estar libre, porque él es inocente y encerrándolo están cometiendo un crimen.

Denunció que están aislando a Lula, impidiendo que reciba visitas,”aislarlo es una forma de punición social y no sé si quienes lo están aislando no están cometiendo otros delitos”.

Sobre esto diría en un breve encuentro con La Jornada, lo que denunció en la Feria del Libro. que temen por la vida de Lula, por la comida que come (no le dejan llevar nada a su familia) y el agua que toma, temo porque impidieron que lo visite un médico. Más aún, dijo que no le permiten que le lleven sus medicamentos desde afuera. Así que no se puede saber que le están dando, esto es gravísimo, es una violación de los derechos humanos que nadie debiera permitir,advirtió y dijo que la figura de Lula se agiganta en América Latina, en Europa, en el mundo.

Libre o preso, Lula será electo como próximo presidente de Brasil, dijo Dilma Rousseff, quien recibió la solidaridad desde diversos frentes sindicales como la Confederación General del Trabajo, la Central de Trabajadores Argentinos, de actores, intelectuales y artistas.

El premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, recordó su última visita a Rousseff y la advertencia sobre el riesgo que corría por aquel entonces la democracia brasileña: “Todavía eras presidenta y la situación ya estaba tensa. Hablé en el Congreso menos de un minuto y dije: ‘le están dando un golpe a la presidenta Dilma, y se armó un lío fenomenal”. Recordó que esto no pasa solamente en Brasil, primero fue el golpe en Honduras; contra Manuel Zelaya luego fue en Paraguay contra Fernando Lugo y después fueron por Dilma. No quieren la unidad continental”.