Las dos opciones femeninas
al como quedamos en la pasada columneta, hagamos hoy un reconocimiento a dos jóvenes ciudadanas que intervinieron en el primer debate llevado a cabo entre los aspirantes a jefe de Gobierno de nuestra ciudad. Ellas son: Mariana Boy, postulada por el PVEM (nobody is perfect), y Lorena Osornio, candidata independiente. No es, en lo más mínimo, falta de reconocimiento a sus propuestas, ni siquiera a su modesto desempeño durante el debate. En lo absoluto. Las escuché con atención y las vi, con altibajos, salvar (rogando para mis adentros que encontraran en el momento preciso la palabra o la imagen deseada para terminar coherentemente una idea. Sufría con ellas su desconcierto y novatez. Me enojaba que a Boy no la hubieran acuerpado lo suficiente, aunque fuera tan sólo por lo lucrativo que a la familia Sesma le han resultado todos los negocios que la producción de la propaganda de los candidatos verdes ha implicado. Aquí las licitaciones, las opiniones de los interesados, están sujetas no a las estrategias convenientes para su triunfo, sino a las utilidades que les reditúa a los ignaros Sesma la producción de la más estúpida, delictiva y mal hecha propaganda política.
¿Recuerdan aquellas expresiones de ¡Vota por un ciudadano, no por un político!? Como si éstos fueran alienígenas (aunque en los tiempos que corren ya a uno le entra la duda). Y cuando patológicamente comenzaron a proponer la pena de muerte, con los argumentos más irracionales, cavernarios y lejanos a la dignidad de la especie humana y se exhibieron como la pandilla delincuencial que siempre han sido y a la que Jorge Alcocer definió con una precisión inigualable: El partido canalla
. Por cierto, que supercliente se han conseguido los publicistas Sesma después del reciente debate. ¿Oiga, Bronco, y qué tal si ofrecemos al público un precio paquete? A partir del primero de julio, a todos los que roben a manos llenas les aplicamos la pérdida de ambas extremidades al dos por uno. ¡Y una auténtica ganga! A los nacidos después del 28 de diciembre de 1957, que se atrevan a homenajear al segundo hijo de Judá, o sea, a Onan (de éste si no me digan ustedes que no saben quién
), se le someterá a una travesura: pena corporal de la misma tesitura. Creo que se le llama emasculación. Convertida en ley esta chiquillada, me resulta difícil creer que El Bronco reincida con otra de sus excepcionales barrabasadas (disparate o travesura grave que provoca perjuicios o desastres). Nada más para atender a mis esporádicos breviarios informativos agrego: el cuerpo de un adulto consta de 206 huesos. Las manos son órganos que forman parte de las extremidades que van de la muñeca hasta las yemas y que, según la opinión del Centro de Tecnología Biométrica de Rusia, permite conocer, por sus relieves, el potencial de cada persona. Por su parte, el pene es el órgano copulador y urinario masculino. Forma parte del aparato genital y constituye el final del aparato urinario. ¿Ociosa e inútil información? ¡Por supuesto que no! ¡Imagine a los tribunales del presidente Bronco diferenciando una felattio de un abuso o de una violación! Afortunadamente, la candidatura de El Bronco hasta ahorita no pasa de ser una aberración de nuestros afanes democráticos.
Pero no dejemos que la popularidad de este candidato le quite sus renglones a doña Lorena Osornio, licenciada egresada de la UVM y con vocación innegable por las candidaturas independientes. La primera fue a jefa de la delegación Cuauhtémoc y la segunda a integrante de la Asamblea Constituyente de Ciudad de México. Frustradas por diversas razones sus patrióticas intenciones de servir a la comunidad, es hasta este tercer intento que consigue su incorporación a la boleta electoral. Y si a la tercera no es vencida, sino a la quinta, pues que persevere, aunque no más allá del estado de Purificación, porque allí sí no puede causar sino grima: el bótox nunca ha sido el camino para lograr votos.
Rivaliza con la señora Calderón en los apoyos conseguidos dentro del ámbito del comercio de la capital: la licenciada egresada de la UVM, quien cuenta con la solidaridad de los comerciantes ambulantes agrupados en la Asociación Alejandra Barrios Richard, quien fue la madre de su esposo, Sergio Jiménez (no confundir con el estupendo actor de Los Caifanes). La licenciada por la Escuela Libre de Derecho es patrocinada a su vez por El Palacio de Hierro. Sí, el grupo Baillères que, con un sentimiento de gratitud verdaderamente ejemplar y conmovedor, entregó de manera absolutamente desinteresada, vale la pena recalcarlo, 5 millones de pesos a su campaña. Como un simple detallito complementario para su cabal información les agrego la que nos proporcionó Roberto Garduño: durante el sexenio de Felipe de Jesús le fueron concesionadas al grupo minero que encabeza el papá del ITAM un millón 329 mil 273 hectáreas del territorio que, según los antiguos, perteneció a los mexicanos.
Dice el dicho que quien a dos amos sirve, con uno queda mal. Pues con razón a los mexicanos nos quedó tan mal Felipe de Jesús, el presidente medio punto
(y muy en duda, el medio punto. Sobre él, como mandatario, no hay ni punto de duda). Pero, muy requetebién les fue a las grandes empresas extranjeras a las que otorgó, para explotación de nuestras riquezas del subsuelo, concesiones que superaron 224 por ciento las del sexenio anterior. Sí, leyeron bien: superó al concesionario de la Coca-Cola en su vocación entreguista con la que hoy, como la zarzamora, llora que llora por los rincones.
Tal vez deba posponer el capítulo relativo a las dos inteligentes y capaces candidatas de la izquierda (cada quien la suya), que se asemejan tanto como una canción de Arjona a una de Sabina. Una de Facundo Cabral a otra de Alberto Cortés. Una película de Chespirito a otra de los hermanos Cohen. Una comiquísima y genial película de Derbez y la peor de Woody Allen. Al director de la Libre de Derecha: Pocarroba y al maestro Mario de la Cueva, de jurisprudencia, de la UNAM. Pepe Woldenberg y el indefinido ente conocido como Luis Carlos Ugalde. Un millar de presidentes mexicanos, secretarios de Estado, gobernadores, legisladores, síndicos, regidores, presidentes municipales, líderes, empresarios, industriales, comerciantes y, por supuesto, clérigos, abates, monseñores, toda clase de purpurados y, por supuesto, obispos, arzobispos y nuncios papales, ante un modestísimo político de un también modestísimo pero digno país hermano, Uruguay: Pepe Mujica.
Faltan uno o dos debates y podremos expresar la opinión de la columneta con la anticipación necesaria para que la multitud tenga más (no sé si mejores) elementos de juicio para definir su voto por alguna de las dos opciones femeninas que se arrogan pasar a la historia como la Rosa de Luxemburgo de la capital. La báscula será implacable pero, tanto como sea posible, objetiva).
Mientras tanto, hay dos cuestiones que me preocupan en serio: las actitudes que han venido asumiendo los candidatos José Antonio Meade y Mikel Arriola. Su transformación (en la literatura) sólo podría ejemplificarse con la Belle et la Bete (1742. Gabrielle Suzane Bardol) y, por supuesto, al malentendido que se traían el afamado doctor Jekyll y el respetable señor Hyde.
Y todavía más entendible, sobre todo para los jóvenes, el caso del científico Bruce Banner y el sencillo ciudadano Hulk: cuando se encabronaba éste, no había poder que lo contuviera.
Bueno, pues me queda claro y trataré de explicarlo más adelante: los enfermos/enfermeros de Meade y Mikel los han enyervado. (Véase el significado de cada palabra, por favor). Al más valioso activo político que el PRI tenía sobre Meade y Arriola, los asesores, inexplicablemente designados, por sus problemas síquicos y emocionales (plenamente comprobables) los han hecho papilla. ¿O no es confesada esquizofrenia cobrar como senador del PAN y asesorar al candidato del PRI? Digo, ¿además de los moches y la desvergüenza que son costumbre en su vida?
Meade y Arriola han sido lo contrario en su vida familiar, social y profesional de lo que sus publicistas los presentan. Esta estúpida engañifa no va a dar buenos frutos para ellos, aunque sí para las facturas de los creadores de su nueva imagen.
Jorge Alcocer hizo otra de las suyas: romper la piñata él solito. El miércoles pasado nos invitó a comer a su casa y nada dijo de su indignada, justa y oportuna denuncia sobre el cursi y tendencioso mensaje electoral, patrocinado por la falsa e hipocritona organización de la sociedad civil que jura que los niños mexicanos le importan, aunque no sean sus nietos.
El sustento legal que esgrime es el que corresponde a quien más sabe del tema. Yo me permitiré agregar algunos pequeños comentarios en torno a los contenidos discriminatorios, racistas y profundamente vejatorios del noble y generoso mensaje.
Twitter: @ortiztejeda