Cuernavaca, Mor.

La Arquidiócesis Primada de México, la comunidad de la Basílica de Guadalupe, la Conferencia del Episcopado Mexicano y la diócesis de Cuernavaca lamentaron la muerte del sacerdote Moisés Fabila Reyes, cuyo cuerpo fue encontrado el domingo por la mañana en la colonia Lomas del Sur, en Cuernavaca, Morelos.

El cura, de 83 años de edad, fue secuestrado el 3 de abril. Pertenecía a la Arquidiócesis Primada de México y ejercía su ministerio en la Basílica de Guadalupe. En varios comunicados, las organizaciones religiosas expresaron su más sincero pésame a los familiares y amigos del presbítero, auténtico ejemplo de entrega sacerdotal.

El vicario de la diócesis de Cuernavaca, Luis Millán, precisó que Moisés Fabila Reyes vino a descansar a esta entidad después de Semana Santa.

Aseveró que de confirmarse que el religioso fue secuestrado, aumentaría la preocupación, pues tres religiosos han muerto de manera violenta en fechas recientes.

El viernes el vicario Juan Miguel Contreras fue asesinado en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, y el miércoles fue ultimado a puñaladas el sacerdote Rubén Alcántara en un templo de Cuautitlán, estado de México. En total, 23 curas han sido asesinados en este sexenio, el más violento para la Iglesia en México, según el Centro Católico Multimedial.

El vicario Luis Millán llamó a las autoridades encargadas de impartir seguridad y justicia a cumplir con sus funciones y reconoció que la mayoría de los mexicanos padecen un clima de violencia. Ahora resulta que, junto con el periodismo, el sacerdocio es uno de los oficios más peligrosos en este país. Ambos ejercemos un servicio a la verdad, dijo.

La Fiscalía General del Estado (FGE) informó que la noche del miércoles familiares del sacerdote acudieron al Servicio Médico Forense a reconocer el cuerpo, localizado el 22 de abril.

La causa de fallecimiento del párroco, según la FGE, fue un infarto al miocardio. De acuerdo con el comunicado de la fiscalía, los familiares habrían denunciado en la Ciudad de México que fue secuestrado.