La reforma a la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos (ASEA), que entraría al pleno de San Lázaro para su aprobación, tiene vacíos que pueden implicar que la toma de decisiones quede en manos de intereses partidistas y empresariales, advirtieron la Alianza Mexicana contra el Fracking, Agua para Todos y otras organizaciones.

En un comunicado recordaron que el 10 de abril la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de decreto, por lo cual las agrupaciones argumentaron la existencia de vacíos que ameritan contar con mayor tiempo para llevar a cabo un análisis minucioso, participativo y amplio de la reforma.

En una carta enviada a los legisladores, explicaron que la inciativa dictaminada por la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales tiene por objeto equiparar a la ASEA con la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y la Comisión Reguladora de la Energía (CRE), en su calidad de Órganos Reguladores Coordinados en Materia Energética (ORCME), lo que excede y se contrapone con la reforma constitucional en materia energética.

Esto porque la ASEA está incorporada en la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, y por mandato constitucional no puede ser considerada como un órgano regulador del sector. Como lo establecen los estándares internacionales, las autoridades ambientales requieren contar con la autonomía e independencia suficiente para el cumplimiento de sus funciones y para asegurar que en sus decisiones priven criterios de protección ambiental.

Advirtieron que la política de medio ambiente en materia de hidrocarburos es un tema de la más amplia relevancia para el país, por lo cual cualquier modificación a la misma debe garantizar un proceso democrático e incluyente de la sociedad en su conjunto que permita analizar la propuesta de reforma a profundidad y desde diferentes perspectivas.