Mexicali, BC. Ningún ser humano es ilegal dice la leyenda con la que caminó desde la zona rural de Mexicali hasta el cerco fronterizo de California el obispo de Saltillo, Raúl Vera, para denunciar la detención y deportación masiva de migrantes en Estados Unidos.

En compañía de activistas y representantes de la Coalición Prodefensa del Migrante, que protestaron por la construcción del muro y la militarización de la frontera, el religioso advirtió sobre la criminalizacion que realiza el gobierno de EU.

“Los migrantes son mensajeros itinerantes de esperanza, de vida, son rebeldes que no se quedaron ahí donde los maltratan y peligran sus vidas, son personas dignas de respeto que buscan otro modelo de vida, sostuvo en entrevista.

A mí me han enseñado mucho, anima verlos que buscan otras oportunidades de vida pero también tenemos que deshacer esas estructuras que causan la migración y el desplazamiento de la violencia.

Consideró que hay artificios ilegales en el fenómeno de los desplazados para sacarlos de su territorio y saquear la riqueza natural, los gobiernos y las empresas usan la violencia para este fin porque su origen es la ambición de la riqueza.

Franco, directo, Vera dijo que en México no hay políticas públicas porque son operadoras de quien está saqueando al país y en el país manda el dinero, al tiempo de criticar al Congreso que desreguló la protección al medio ambiente, al territorio, a la soberanía alimentaria, al mercado y a la producción interna.

Los gobernantes de los últimos 30 años han gobernando contra nosotros, contra este país, en favor de multinacionales y las políticas del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio, no tenemos un gobierno para nosotros, sino para las potencias del capital del mundo, comentó frente al muro de metal del este de Mexicali.