Washington. América Latina debe emprender ajustes fiscales graduales para consolidar e impulsar su crecimiento, aprovechando que, excepto Venezuela, se encuentra en la senda de la recuperación económica, afirmó ayer el Banco Mundial (BM). Los persistentes déficit y altos niveles de endeudamiento pueden poner en riesgo los logros alcanzados en décadas recientes, como la baja inflación, la reducción de la pobreza y la desigualdad y la generación de crecimiento inclusivo, aseveró Carlos Végh, economista jefe del BM para América Latina y el Caribe. A largo plazo, menores déficit fiscales y cargas de deuda ayudarían a consolidar esos logros y a impulsar el desarrollo, añadió al presentar el más reciente informe semestral de su oficina. El documento Ajuste fiscal en América Latina y el Caribe. ¿Costos en el corto plazo, beneficios en el largo? alerta sobre la frágil situación fiscal en la región luego de años de débil crecimiento. Destaca que, ante un entorno externo positivo (mayor precio de commodities, desarrollo de Estados Unidos y China, alta liquidez internacional), lo mejor para aprovechar la reactivación actual es construir espacio fiscal. Apurar reformas fiscales y estructurales, en especial en sistemas previsionales, permitirá aplicar políticas contracíclicas cuando las condiciones sean menos favorables y liberará recursos para disponer ante potenciales desastres naturales, destacó.