Protestan contra las reformas de Macron; tendrán respaldo de otros empleados públicos
El proyecto del gobierno es suprimir 120 mil puestos de trabajo de aquí a 2022
Martes 3 de abril de 2018, p. 23
París.
Francia experimentó este lunes el comienzo de lo que serán tres meses de huelgas intermitentes de ferrocarriles contra las reformas económicas del presidente Emmanuel Macron, a las que se sumarán otros sectores públicos, como el de los recolectores de basura y energía.
El personal de la estatal Sociedad Nacional de Ferrocarriles Franceses (SNCF, por sus siglas en francés) comenzó un paro que se prolongará hasta el jueves por la mañana; ésta será la primera de una serie de huelgas de dos días que tienen previsto repetir cada cinco días hasta junio.
Los ferrocarrileros exigen un plan gubernamental que los proteja contra la supresión del estatuto especial de los trabajadores para los nuevos contratados, la apertura del servicio a la competencia y la transformación de la empresa en una sociedad anónima, lo que abre la posibilidad a una futura privatización del sector, maniobra negada por el gobierno de Macron.
También anunciaron que debido al paro no habrá servicio martes y miércoles en las provincias del país y otras regiones conectadas con el sistema francés en Europa, pero la verdadera movilización comenzará este martes, en una jornada que la prensa local bautizó como martes negro
.
Entre el personal que deberá declararse huelguista con 48 horas de antelación, la SNCF ya contabilizó casi un ferroviario de cada dos (48 por ciento) y más de tres de cada cuatro entre los maquinistas (77 por ciento).
En tanto, Philippe Martínez, secretario general del sindicato, llamó a la convergencia de luchas
en el movimiento, ante el creciente descontento entre los jubilados, los estudiantes, los recolectores de basura y los empleados del sector energético, quienes también irán a huelga este martes.
El conflicto representa el mayor desafío contra la agenda reformista de Macron desde que llegó al poder, en mayo de 2017. La huelga ferrocarrilera apuesta por un desgaste de la opinión pública, que de acuerdo con los sondeos, considera injustificado el paro, pero tal opinión podría cambiar si el presidente se muestra intransigente y voltea hacia la privatización.
El proyecto de reforma de la función pública de Macron prevé la supresión de 120 mil puestos de trabajo de aquí hasta 2022, para ahorrar 4 mil 500 millones de euros.
En tanto, la aerolínea privada Air France va a parar actividades este martes, por cuarta vez en poco más de un mes, en busca de un aumento general de 6 por ciento salarial, y tiene convocadas más jornadas de paro para el 7, 10 y 11 de abril, en un movimiento que no está directamente relacionado con las reformas de Macron.