Estaban programados desde antes del sismo de septiembre pasado, señalan
Autoridades cancelaron una reunión en la que iban a dar a conocer los trabajos
Martes 3 de abril de 2018, p. 29
Padres de familia y autoridades de la delegación Cuauhtémoc demandaron a la Secretaría de Finanzas del gobierno capitalino la liberación de 140 millones de pesos asignados para la rehabilitación de las escuelas públicas del Centro Histórico, programados el año pasado mucho antes de las afectaciones causadas por el sismo del 19 de septiembre, que generó nuevos daños.
La coordinadora territorial del Centro Histórico, Tania Argumedo, precisó que se trata de 51 inmuebles, de los cuales 14 tienen daño estructural y algunos se encuentran cerrados, por lo que las autoridades de la Secretaría de Finanzas y de Educación de la Ciudad de México habían acordado una reunión ayer con los padres de familia para dar a conocer los detalles para iniciar los trabajos a mediados de marzo, la cual fue cancelada a última hora.
Uno de los inmuebles afectados es la Secundaria 11, ubicada en la calle Belisario Domínguez, que fue desocupada en agosto del año pasado, al inicio del ciclo escolar, pero hasta la fecha no se ha hecho ningún trabajo de rehabilitación, por lo que todos los días los estudiantes deben ser trasladados a una escuela en Tlatelolco.
Jorge Gómez, padre de familia, señaló que a pesar de que han realizado movilizaciones, las autoridades educativas ni siquiera les han presentado un proyecto para la rehabilitación del edificio. Hay desinterés absoluto y quienes lo padecen son los niños, que no han podido regresar al plantel
, expuso.
En la lista de escuelas deterioradas también se encuentra la primaria Abraham Castellanos, que presenta cuarteaduras en todos los salones, desfase en la escalera, fisuras en columnas, varillas expuestas y corrosión, así como daños en elementos estructurales.
En otro punto, la Escuela Primaria República de Argentina está en condiciones similares, por lo que requiere cambio de vigas en el pasillo del primer nivel, reparación de sanitarios, impermeabilización de la azotea y rehabilitación de las escaleras.
En todos los casos, los centros escolares ya se encontraban deteriorados por la falta de mantenimiento durante años, como ocurre en la Escuela Secundaria 73 Ernest Rutherford, cuyo único acceso tiene riesgo de colapso, por lo que se programó una partida especial para su rehabilitación, y en algunos de ellos los daños se intensificaron con el sismo, como sucedió en la Primaria Participación Social número 6, donde uno de los edificios está cerrado.