El Ejecutivo realizó un recuento de las leyes aprobadas
Jueves 29 de marzo de 2018, p. 3
La protección de los derechos humanos en México ha estado basada en tres pilares
básicos, que son la construcción de un marco legal adecuado para tal fin, el desarrollo de instituciones que le den operatividad a esas normas y la plena observancia de ellas en la vida cotidiana, afirmó el presidente Enrique Peña Nieto.
Durante la entrega del informe de labores 2017 de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) –cuyo titular, Luis Raúl González Pérez, advirtió que el balance en materia de protección a las garantías básicas es desfavorable
–, el jefe del Ejecutivo optó por hacer un breve recuento de los que consideró avances en este terreno.
De acuerdo con Peña, en lo que va de su administración se ha fortalecido el régimen jurídico de derechos humanos, por medio de las leyes generales de Víctimas, para Prevenir y Sancionar la Tortura, la de Desaparición Forzada de Personas y la de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
De igual forma, destacó la emisión del Código Nacional de Procedimientos Penales, la reforma al Código Penal Militar y la nueva Ley de Amparo. No obstante, el mandatario reconoció que contar con una legislación adecuada es esencial, pero no suficiente
, por lo que aseguró que se ha avanzado de forma paralela en el desarrollo de instituciones sólidas que contribuyen a que los derechos humanos pasen del papel a la práctica
, entre ellos el nuevo sistema de justicia penal acusatoria.
También citó como avances la inauguración de 32 nuevos centros de justicia para las mujeres víctimas de violencia y la creación del Sistema de Protección Integral para Niñas, Niños y Adolescentes y el Sistema Nacional de Atención a Víctimas.
En lo que se refiere al ámbito de la plena observancia de los derechos humanos
, Peña Nieto puso ejemplos relacionados con la capacitación de servidores públicos del sector salud, la coordinación con otros países para agilizar la repatriación de migrantes indocumentados y el desarrollo de protocolos de uso de la fuerza para la Policía Federal, el Ejército y la Marina.
Aunque el titular de la CNDH alertó que la mayoría de las recomendaciones de dicha institución no han sido cumplidas a cabalidad por las diversas instituciones gubernamentales del país, el mandatario reiteró que su administración ha mostrado su absoluta disposición para recibir, aceptar y dar cumplimiento
a dichos señalamientos.
En ese mismo tono, Peña reconoció las aportaciones tanto de la CNDH como de las organizaciones civiles de defensa de los derechos humanos, a las que describió como parte de una de las fuerzas más poderosas
del país.
En muchos casos, son voces ciudadanas las que señalan áreas de oportunidad, denuncian abusos o generan valiosas propuestas de políticas públicas en favor de los derechos fundamentales. Aunque en ocasiones haya diferencias y opiniones distintas, el Estado mexicano debe valorar estas contribuciones y continuar abriendo espacios para la sociedad civil
, indicó.