El reto de nuestro país es revertir tres binomios: pobreza-desigualdad, inseguridad-violencia y corrupción-impunidad, señaló el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, en el foro: Méxicos Posibles.

El funcionario indicó que para el país y sus instituciones significa un reto gigantesco erradicar las tres íes, que son: inequidad, inseguridad e ilegalidad, pero hay la certeza de que la nación es más grande que sus problemas y que sí se pueden solucionar si se trabaja con la mira clara de abatirlos y de que haya justicia para todos los ciudadanos.

Desde su punto de vista, los mexicanos tienen un gran potencial para construir metas y fines comunes, a partir de la pluralidad y la diversidad, incluso para dejar a un lado las diferencias, y esto debería ser el eje vertebral para trabajar en acciones para lograr el país que los mexicanos queremos.

El foro Méxicos Posibles es una iniciativa ciudadana, que surgió en 2015 por diversos actores que buscaron un mecanismo innovador para contribuir a corregir el rumbo del país, impulsar una verdadera cultura de la legalidad, fortalecer el estado de derecho y tener instituciones sólidas.

El encuentro, que tuvo lugar en el Palacio de Minería, fue inaugurado por el coordinador de Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Domingo Alberto Vital Díaz, quien a nombre del rector de la máxima casa de estudios, Enrique Graue, planteó que el futuro del país y su sociedad recae en la capacidad que se tenga de visualizar y debatir las escenarios políticos, económicos y sociales que se avecinan, y emprender acciones ante ellos.

La UNAM, dijo, es la sede de esta iniciativa, que representa un espíritu de cambio fincado en la realidad.

Los organizadores de esta iniciativa tuvieron el asesoramiento de una consultora en innovación social: Reos Partners, que ha abordado desafíos complejos alrededor del mundo y creó un equipo de personas provenientes de todo el sistema social y político –de la academia, funcionarios públicos, líderes indígenas, fuerzas armadas, iglesia, empresarios– con disposición de mejorar y capacidad de incidir en el futuro del país.

Lo anterior, porque para 2030 se vislumbran varios Méxicos Posibles, como son un país agandallado por grupos de poder que actúan para mantener sus privilegios y riqueza; o pasmado, donde los cambios son limitados; una nación fallida donde la sociedad se polariza; o responsable, donde las élites y gobernantes trabajen por las mayorías y se fortalezca el estado de derecho y la legalidad.

En el encuentro participaron diputados, senadores, representantes populares, empresarios, sacerdotes y funcionarios públicos que plantearon los diversos escenarios y las acciones a tomar para corregir el camino que lleva el país.