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Cecilia Navarro Hay que trabajar desde el territorio,
María Luisa Albores, quien encabezaría la Secretaría de Desarrollo Social en esta coalición, es ingeniera agrónoma, trabaja para la Unión de cooperativas Tosepan y será la secretaria de desarrollo social de la coalición Juntos haremos historia. Aquí algunas de sus ideas: Agenda campesina y desarrollo social Cuando hablamos de dónde están los sujetos más pobres es en el campo. Ahí es donde tenemos que revertir la pobreza. Hay que meter recursos para el campo y empezarlo a trabajar, con Sagarpa, Semarnat o Sedatu, pero, eso sí, la gestión tiene que venir desde la parte del sujeto social, hay que escuchar a las personas. Creo en trabajar desde el territorio, de abajo hacia arriba, y no lo que siempre ha pasado, desde el escritorio, que hacen indicadores para medir y dicen que el programa es fabuloso cuando tú estás viendo que no es fabuloso y no hace nada para impedir que en las regiones haya más población, más pobreza, más migración y más violencia. Cambios en la Sedesol Primero se tendría que estructurar una secretaría diferente, que sirviera para ir disminuyendo la desigualdad. Hay que cambiar la visión de la secretaría y asumir que no va a ser un brazo instrumentador de un sistema que quiere tener pobres porque luego le sirven electoralmente. Buscar que ya no sean dádivas a través de programas. Vamos cambiando eso. El objetivo de la secretaría sería contribuir a que disminuya la desigualdad de quienes habitan los territorios, con un uso racional de agua, flora, fauna y demás. Transversalidad Necesitamos tener un cambio de pensamiento en toda la institución. O sea, es Sedesol, es SEP, es Sagarpa, algo más transversal. Necesitamos que las instituciones trabajen transversalmente, eso puede ser el gran cambio. Ya lo empezamos a trabajar con los compañeros de las otras secretarías pues es algo que tendríamos que hacer juntos. Las (repugnantes) despensas de los programas sociales Tengo una escuela y siempre digo mis niños no son astronautas ¿para qué les mandan huevo deshidratado?, es repugnante, para preparar eso tienes que meterle mucho aceite. ¿Quién se está llevando ahí la lanota? Las empresas. Viene ya empacado por el DIF, ahí hay un negocio que no es transparente. De las cosas que se quieren hacer desde la Sedesol es trabajar con las escuelas rurales para impulsar los huertos escolares. Esto para los niños significa actividad física, ellos tienen que atender el huerto, les da alegría y llegan al salón despejados, porque ya tuvieron el trabajo en el campo, obtienen jitomates, quelites, elotes, frijoles, ¿de dónde? De su huerto y eso sirve para desayunar y se complementa con algunas cosas que no se producen localmente. Sedesol tiene una buena estructura con el programa Prospera, tiene promotoras, que, si se utilizaran con una buena metodología, ese huertito escolar sería replicable en las casas de beneficiarios de ese programa. Insurgencia electoral campesina Me parece muy bien. De donde más se sirven el PRI y el PAN es del voto verde, en las zonas rurales, llegan con despensas, si eres chavo con una tarjetita para tu celular, o sea, se las imaginan de todas a todas, dependiendo de dónde va a venir el voto vienen las regalías y los regalos. Yo creo que sí se debe de señalar que justo este 2018 lo que estamos jugando es la soberanía del país. Hay mas de 430 conflictos socio-ambientales en el país, no estaba así en el 2012, y no podemos no hacer nada.
Los transgénicos van de salida: Víctor Villalobos
Uno de los integrantes del gabinete de AMLO que más polémica ha causado, Víctor Villalobos, por su pasado en el que desde diversos espacios impulsó los organismos transgénicos, asegura que los OGM son cosa del pasado: Los transgénicos son una tecnología que va de salida, hoy hay tecnología de otra índole que está superando plenamente los transgénicos. Es un tema que en los próximos años va a dejar de ser un nicho. El tema es la necesidad de hacer de este país más autosuficiente en seguridad alimentaria. Me inclino por usar técnicas convencionales en la producción de maíz. Entonces yo dejaría el tema de los transgénicos de maíz. Nuestro país, hoy tan dependiente de la importación de maíz, con un crecimiento promedio de tres toneladas por hectárea, lo que tiene que hacer es usar los métodos convencionales de producción de maíz. Utilizando técnicas convencionales, semilla híbrida, buenos fertilizantes, manejo de suelos, las tres toneladas podemos duplicarlas y eso sería una revolución. La situación del campo Todos estamos de acuerdo en que necesitamos un cambio en la agricultura. Necesitamos una agricultura moderna, más equitativa, más productiva, más eficiente y responsable desde el punto de vista ambiental. No podemos seguir produciendo a expensas de nuestros recursos naturales. Tenemos que cambiar con tres objetivos: inclusiva, que tome en cuenta a los excluidos; más productiva, porque somos cada vez más dependientes de la importación; y más responsable ambientalmente. Nuestro país dejó de invertir en investigación, transferencia de tecnología y extensionismo de la agricultura desde hace más de 30 años. Entonces no es raro que el sector esté peor, la bajísima productividad se tiene que compensar con subsidios, que no inciden en la productividad. Son paliativos para tener a la gente entretenida, coptada. Necesitamos una visión de mediano y largo plazos, incorporación del conocimiento y un programa moderno de extensión. Hemos venido importando productos básicos. En 2017 nuestro país se convirtió en el principal importador de maíz del mundo, y esto es vergonzoso porque México es el centro de origen y domesticación de esta especie, somos maíz, pero hoy importamos de 14 a 16 millones de toneladas, es inconcebible. Tenemos que cambiar la política, manejar un sistema de precios que estimule la productividad. Asociar los estímulos a los seguros y a los créditos para llegar a un sistema virtuoso de la mejora de la producción. Soberanía y la autosuficiencia alimentaria Tenemos que reconocer que debemos de tener una política diferenciada porque tenemos agriculturas muy diferentes, reconociendo el éxito de nuestra agricultura del norte y noreste, donde el gobierno tiene que promover y asistir, que no dependa de Norteamérica, sino con una política muy agresiva de búsqueda de otros mercados y diversificación de productos. Estamos posicionados en tomate, aguacate, ojalá podamos estarlo en frutas tropicales, café, cacao. Y el reto, el otro tipo de agricultura, mucha de la cual tristemente es de autosuficiencia, es la agricultura familiar, que necesita ser asistida en forma diferente. Necesitamos acompañar esta producción para garantizar la seguridad alimentaria de las comunidades más pobres, a través del desarrollo plural, con enfoque territorial. Hay una gran cantidad de pequeñas tecnologías prácticas para armar pequeñas cadenas productivas, que produzcan frijol, arroz, maíz, frutales para tener beneficios por sus productos y su productividad, atender mercados locales e irse adueñando de eslabones de la cadena. Este es uno de los grandes objetivos de la política del candidato Andrés Manuel López Obrador que busca mejorar la calidad de vida de las personas más desprotegidas. Sedesol, asistencialismo para pobres y Sagarpa, grandes cantidades de recursos para ricos Se están repartiendo recursos económicos en los últimos 10, 11 años, pero no sirven a la productividad ni erradican la pobreza. Da la impresión de que los recursos de la Secretaría van en incremento, y ¿dónde está el impacto? El recurso económico no está incidiendo en la productividad. Tenemos que hacer un mecanismo transparente de manejo de recursos y vincularlos con la productividad. Es muy importante tener extensionistas comprometidos, técnicos jóvenes que sepan de buenas prácticas agrícolas que tienen que ver el uso adecuado del agua, las semillas, del control de plagas y enfermedades. Ahí tenemos que meter dinero. Cuando logremos eso, que no es muy difícil, veremos el beneficio porque el productor tendrá un mejor rendimiento, un mejor manejo de sus suelos, un mejor ingreso, y le podemos ayudar a que tenga acceso a mercados locales y venda mejor sus productos. La idea es muy clara: cero corrupción; transparencia en el uso de los recursos; un sistema de rendición de cuentas medible, con orientación a resultados, e ir modificando esa inercia de estar dispersando recursos sin ayudar a la productividad. AMLO reconoce que el TLC empobreció al campo y socavó la seguridad alimentaria. ¿Su posición? Hay que reconocer que la cuota de sacrificio del Tratado fue la agricultura. Pero hay que reconocer que después de 20 años y gracias a la presión que ejerce una asociación comercial de esta naturaleza, lo que trajo fue el desarrollo de la tecnología y la implementación de metodologías que nos deberían de llevar a los mercados americanos y canadienses. Otro tema que nos deja el Tratado es que hemos exacerbado la dependencia de Norteamérica y eso nos ha evitado diversificar, hemos desprotegido nuestra presencia en otros países. Tenemos que entrar a otras regiones del mundo con esa experiencia. La revolución verde a tantos años La agricultura extensiva de un monocultivo, de una sola variedad, de la utilización de agroquímicos extensivamente, únicamente pensando en la productividad por ciclos, fue exacerbando ese principio de la revolución verde que tuvo su origen en buscar la seguridad alimentaria y se transformó en una agroindustria muy agresiva contra el ambiente. No podemos seguir produciendo a tan alto costo ambiental porque es insostenible, tenemos que cambiar eso para reducir el impacto en el cambio climático de la agricultura. La revolución verde hasta donde la llevamos es una revolución altamente costosa desde el punto de vista ambiental y no está garantizando la sostenibilidad de la agricultura del futuro, tenemos que regresar a las prácticas tradicionales, convencionales, menos eficientes en productividad, pero más sostenibles. Menos manejo del agua, menos agroquímicos, controles biológicos, uso de fertilizantes orgánicos, en fin, una serie de buenas prácticas agrícolas que existen y tendríamos que revertir eso. Críticas y dudas ante su nombramiento En cuanto a las críticas, yo he sido un ingeniero agrónomo dedicado al conocimiento y la tecnología agrícola toda mi vida. Lo único que he hecho es aportar mi conocimiento en beneficio de la agricultura y especialmente de la agricultura más pobre. Que critiquen que a mí me paga Monsanto, pues ojalá me hubieran pagado… Yo soy una persona ética, he vivido de mi salario. No se refieren a dinero, sino a la promoción de transgénicos, incluso en convenios internacionales Yo fui jefe de la delegación mexicana en Kuala Lumpur, decir que yo controlé una reunión de más de 120 delegados, no tengo esa habilidad. Cuando entra en acción el Protocolo de Cartagena nosotros ya teníamos una relación comercial en el movimiento transfronterizo de granos entre Canadá, Estados Unidos y México. Era un intercambio de grano. México se adhirió al Protocolo, Estados Unidos, no y Canadá lo estaba pensando. Entrar al Protocolo en esos términos iba a afectar directamente el comercio de granos entre los tres países. Lo discutimos internamente, han pasado ya muchos años, no se ha resuelto, y hoy somos cada vez más dependientes. Entonces que sean transgénicos o no, yo estoy tranquilo porque era mi responsabilidad como jefe de delegación. Si me quieren atribuir esas visiones de que yo bloquee, el tiempo ha demostrado que era necesario, hoy se están importando 31 millones de toneladas y el tema no se ha resuelto. Ellos dicen que soy pro transgénico, yo estudié un PHD en Genética, tengo mi visión de los transgénicos. Hay gente que está cuestionando este nombramiento, pero estoy tranquilo, yo entiendo que el candidato también. Relación con campesinos y organizaciones Yo soy una persona de campo, me encanta estar con campesinos y tengo mucho que aprender, mucho que enseñar. Soy agrónomo de Chapingo orgullosamente y tengo muchos sentimientos de que necesitamos revertir la extrema pobreza de nuestros campesinos y nuestros indígenas. Mi interés es estar con ellos. Es un alto honor servir a mi país.
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