Londres.

La derrota 0-3 del West Ham ante el Burnley desató el enojo de los aficionados de los Hammers al grado de que invadieron la cancha para agredir a los jugadoras y desataron varios desmanes en las tribunas, lo que dejó al plantel bajo la amenaza de severas medidas disciplinarias.

Después del primer gol del Burnley, algunos aficionados invadieron el terreno de juego, por lo que el defensa James Collins los exhortó a abandonar el césped.

Uno de los aficionados fue detenido y lanzado al suelo por el capitán de los Hammers, Mark Noble, furioso al ver que sus propios seguidores atacaban al equipo.

Soy un seguidor del West Ham, pero si alguien se acerca a mí, me protejo, se defendió Noble. Ocurre esto desde hace dos temporadas, cuando nos mudamos a este estadio. Cada vez que perdemos los dirigentes son criticados. Parece que los seguidores están hartos, añadió.

La situación empeoró cuando Chris Wood amplió la ventaja y al 70, lo que provocó nuevas escenas de caos. Varios centenares de aficionados la emprendieron contra el palco, pidiendo a los propietarios que se fuesen, acusándolos de haber destruido el club. Un seguidor se hizo con un banderín de córner antes de plantarlo en el círculo central.

Los futbolistas del Burnley resguardaron a varios niños en el área técnica durante los incidentes.

Wood marcó al 82 el tercer tanto contra el West Ham, que ya mira de cerca la zona de descenso. Javier Hernández entró de cambió al minuto 71, pero no pudo hacer nada para evitar la estripitosa derrota.

Los desmanes podrían costar caro al West Ham, ya que la Federación Inglesa (FA) condenó firmemente lo ocurrido, indicando que espera los informes del club y del árbitro.

En otros resultados, el Manchester United derrotó 2-1 a Liverpool para afianzarse en el segundo puesto de la tabla general. Marcus Rashford destacó al anotar los dos goles.

En tanto, Chelsea derrotó 2-0 al Crystal Palace, Leicester goleó 4-1 a West Brom que está último en la tabla y prácticamente condenado al descenso; Everton superó 2-0 a Brighton y Newcastle 3-0 a Southampton.

En francia, unos cien ultras del Lille invadieron el campo para golpear a los jugadores de su equipo, que fueron escoltados por la policía hasta a los vestuarios, tras el empate 1-1 ante el Montpellier.