Roma.

Al menos cuatro personas murieron víctimas de la ola de frío siberiano que azota Europa, la cual perturbó los sistemas de transporte de varios países y obligó en muchas ciudades a cerrar las escuelas.

La Bestia del Este, como la llama la prensa inglesa, cubrió de nieve Roma, donde nevó por primera vez en seis años, alimentada por vientos gélidos provenientes de Rusia, y hará caer las temperaturas a niveles inusuales en varias partes de Europa.

En la capital italiana, que vivió su primera nevada desde febrero de 2012, con hasta cuatro centímetros de nieve en las calles, la alcaldía decidió cancelar las actividades en las escuelas y la compañía de ferrocarriles abrió varias estaciones para albergar a los sin techo.

En Roma –similar a los pronósticos en París– se registró una temperatura inusual de cero grados Celsius este lunes en la mañana y así seguirá hasta el miércoles, cuando se prevé que el termómetro llegue hasta -6.

En Turín, al norte de Italia, una fuerte nevada obligó a posponer el domingo un partido de futbol de la Serie A, entre Juventus y Atalanta.

Dos personas murieron de frío en Polonia por temperaturas extremas, según informó el Centro Nacional de Seguridad.

La noche del domingo los termómetros marcaron -26.2 grados centígrados en la ciudad de Goldap, al norte de Polonia, donde este lunes se registraron mínimas de hasta -11 para el este del país.

Preocupación por los sin techo

En Francia, donde las temperaturas caerán a -10 grados Celsius y la sensación térmica será de -18 C en los próximos días, se han abierto refugios de emergencia para las personas sin techo.

En la ciudad de Valence, en el sudeste de Francia, un hombre de calle fue hallado muerto el domingo, luego que el viernes se registró la muerte de otro en un suburbio de París. En ambos casos las autoridades creen que se trata de decesos relacionados con el recrudecimiento del frío.

El servicio de meteorología británico, el Met, advirtió el domingo que esta semana parece que será la más fría en Reino Unido en varios años. El lunes regía una alerta amarilla anunciando posibles problemas de transporte por nevadas que se espera se habrán de intensificar martes y miércoles.

En Berlín, donde se estima que al menos 3 mil personas viven en las calles, los refugios tuvieron una ocupación de 95 por ciento la noche del domingo al lunes, y las autoridades temen verse superadas en las próximas noches, con pronósticos de hasta -20 grados, informó la radio pública RBB.

Ni Rusia se salva de esta ola extraordinaria de frío extremo. Su servicio meteorológico advirtió de temperaturas anormalmente frías, de entre -14 C durante el día y -24 C durante la noche.

En Suecia, donde la ola de frío coincidió con las vacaciones escolares de invierno, la mayoría estaba feliz de la abundancia de nieve, con temperaturas que oscilan entre -5C en Estocolmo y -20 C en las montañas cerca de Östersund, donde muchos suecos están pasando sus vacaciones de esquí, como las llaman en varios países de Europa.

En la capital austriaca se organizaron cursos especiales de esquí de fondo en los parques de Viena, ya que las temperaturas bajaron a menos de -20 ° C en toda Austria.

El río Danubio se había congelado en algunos lugares, pero las autoridades vienesas pidieron a la ciudadanía que se abstuviera de hacer patinaje, porque existe una gran probabilidad de que se rompa el hielo.