El titular de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México, Edmundo Garrido Osorio, afirmó que los presuntos narcomenudistas involucrados en la balacera del viernes pasado en Ciudad Universitaria (CU) no están relacionados con la organización de Jesús Pérez Luna, El Ojos, asentada en la delegación Tláhuac, sino que operan en la colonia Santo Domingo, Coyoacán.

De hecho, subrayó, la investigación arroja que no se trató de un enfrentamiento entre grupos de vendedores de droga, sino que fue una riña entre un supuesto narcomenudista y un comprador, que derivó en una agresión a balazos en la que murieron dos personas.

Lo anterior, dijo, se desprende de la declaración de los dos detenidos ese mismo día, quienes ya fueron vinculados a proceso, en las inmediaciones del campus, quienes atestiguaron los hechos, la cual fue corroborada con el seguimiento de las imágenes de las cámaras de video proporcionadas por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Explicó que si bien en un primer momento se había dicho que ninguno de los dos occisos tenía antecedentes penales, subrayó que al hacer un rastreo de las huellas dactilares, resultó que uno había sido detenido en enero pasado por delitos contra la salud, también en las inmediaciones de CU; sin embargo, fue puesto en libertad por un juez de control.

Garrido Osorio aseguró que los narcomenudistas que operan en CU son bandas de Santo Domingo, delegación Coyoacán, y esto nosotros lo hemos acreditado por las detenciones que se han realizado a lo largo de este año y el pasado; la mayoría tiene su domicilio en esa zona; no tienen nada que ver con Tláhuac.

Dijo que con las declaraciones de los detenidos poco después de ocurridos los hechos, se ha logrado obtener datos, como los apodos y retratos hablados tanto de la persona que disparó como de quien lo acompañaba y junto con el cual se dio a la fuga.

Respecto de su situación jurídica, señaló que si bien no están relacionados con los homicidios, fueron puestos a disposición de un juez de control, toda vez que en el taxi en el que viajaban se les encontró más de un kilo 600 gramos de mariguana, así como un arma calibre 25 milímetros.

Se les acusa de delitos contra la salud con fines de comercio y portación ilegal de arma de fuego, y se está a la espera de que el juzgador los vincule a proceso por dichos ilícitos, que tienen penalidades hasta de seis años de prisión.

El procurador capitalino señaló que luego de estos hechos, se han logrado otras tres detenciones por narcomenudeo en las inmediaciones de CU, con lo que suman 29 personas aprehendidas en esa zona de enero de 2017 a febrero de este año.

Sobre este asunto, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, manifestó que se trabaja de manera coordinada con la UNAM e insistió en que las autoridades capitalinas no ingresarán al campus.