Pobladores de Tonalá, Chiapas, afectados por el terremoto del 7 de septiembre pasado exigieron al gobierno federal entregar los recursos para la reconstrucción de viviendas y aseguraron que persisten anomalías.

Alejandra Ruiz Pineda, representante del barrio Nuevo de Tonalá y quien perdió su vivienda, sostuvo que sólo se han entregado a los perjudicados 90 mil de los 120 mil pesos que les ofreció el gobierno federal.

Nos dijeron que a finales de diciembre nos entregarían los 30 mil pesos restantes, pero no ha ocurrido ni hay quién informe cuándo nos lo darán. Agregó que su casa está a medias, pues le falta el techo y los materiales ya subieron de precio.

Señaló que sólo a 35 por ciento de los afectados se les asignaron folios para recibir apoyos, y de este grupo apenas una cuarta parte tienen tarjetas, pero no el dinero completo.

Destacó que en el barrio Nuevo de Tonalá, donde el terremoto dejó más de 300 familias afectadas, una persona no recibió tarjeta y cuando revisó en la base de datos descubrió que aparece entre quienes ya recibieron dinero.

Estamos nerviosos. Ya queremos regresar a nuestras casas, a nuestra vida diaria, porque estamos pagando renta. Vienen las campañas políticas y nos van a ir relegando cada vez más, dijo a su vez Nicolás Aguilar García, otro damnificado.

Aseguró que existen “muchas irregularidades, como duplicidad de tarjetas y cambios de nombre. Sabemos de cinco personas a quienes les quitaron sus tarjetas por estos errores, y cuando se las regresaron ya les habían ordeñado 5 mil pesos a cada una”.

En Juchitán, Oaxaca, funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano y del gobierno estatal recorren con discreción, casi como a escondidas, viviendas dañadas por el sismo del 7 de septiembre. Servidores públicos que solicitaron anonimato dieron a conocer que su misión es verificar pérdidas totales de viviendas que no fueron censadas o cuyos propietarios sólo recibieron apoyo por afectaciones parciales.