Londres.

La organización humanitaria británica Oxfam volvió a contratar a uno de los trabajadores despedidos por presunta conducta sexual inapropiada en Haití tras el terremoto de 2010, informó el diario británico The Independent.

La organización caritativa ofreció disculpas por el grave error, poco después de que el ex obispo sudafricano y Nobel de la Paz, Desmond Tutu, renunció al cargo de embajador de Oxfam, ante el escándalo en que está envuelto su personal.

El diario The Times publicó el viernes pasado que algunos funcionarios de Oxfam contrataron prostitutas en Haití, donde se encontraban en una misión por el terremoto de 2010 en el país. Además, varios empleados de la organización están acusados de violación en Sudán del Sur y de abusos sexuales en Liberia.

Oxfam, una poderosa confederación de 20 ONG presentes en más de 90 países, no confirmó ni negó esa información específica, pero ha dicho que una investigación interna realizada en 2011 confirmó que sí ocurrieron conductas sexuales inapropiadas, y ofreció disculpas.

La organización humanitaria está bajo amenaza de perder el financiamiento del gobierno británico por las acusaciones de conducta sexual inapropiada en Haití y Chad, y por lo pronto, entre el sábado y este lunes mil 270 personas cancelaron sus donativos.

Un vocero de Oxfam confirmó que uno de los empleados que se comportaron de manera sexual inapropiada en Haití fue despedido de su puesto en 2011, pero subsecuentemente fue contratado como consultor en Etiopía, de octubre a diciembre de ese año.

Haber contratado, aun en una situación de emergencia, como consultor por una breve temporada fue un error serio que jamás debió ocurrir, afirmó la ONG en un comunicado. Seguimos investigando cómo ocurrió esto, lo que nos conduce a revisar los procesos de reclutamiento en la organización y en el sector humanitario, añadió.

Tres empleados más, incluido el director de Oxfam en Haití, Roland van Hauwermeiren, renunciaron tras las investigaciones conducidas a ese respecto por la organización en 2011.

En ese contexto, Tutu, de 86 años, dijo estar profundamente decepcionado por acusaciones de inmoralidad y posible criminalidad que involucra a trabajadores humanitarios vinculados a la caridad, en un comunicado en el que anunció su retiro como embajador de Oxfam.

Su decisión se sumó a la de la actriz británica Minnie Driver y del cantante de Senegal Baaba Maal, quienes también dejaron su papel de embajadores de la organización caritativa.

En una entrevista con el periódico belga Het Nieuwsblad, Van Hauwermeiren, denunciado en 2004 por abuso sexual, cuando estuvo destacado en Liberia por la ONG británica Merlin, reconoció haber cometido errores cuando trabajó para Oxfam en Haití, pero negó haber contratado a prostitutas o haber abusado a menores.

El ejecutivo consideró que algunos de los hechos fueron exagerados y las denuncias están llenas de mentiras, y agregó: lo más duro es que mi familia ya no quiere verme.

Añadió que mucha gente, incluso la prensa internacional, quedarán sorprendidos cuando escuchen mi versión, y confirmó que pronto la ofrecerá por medio de su abogado.

En otra misiva de cuatro páginas enviada al canal VTM, Van Hauwermeiren acusó a un ex empleado de ser la fuente de los reportes sobre la contratación de prostitutas y los potenciales abusos sexuales.

El ejecutivo aseguró estar profundamente avergonzado y reconoció haber renunciado a su cargo para Oxfam en Haití por no haber conseguido ejercer control suficiente sobre miembros del personal acusados de mala conducta sexual.

Aseguró que nunca organizó orgías ni visitó burdeles en el país, aunque admitió haber tenido una breve relación de carácter sexual con una haitiana, a quien conoció tras entregar a su hermana menor ayuda en forma de leche en polvo y pañales para su hijo. Negó haber pagado por sexo, pero dijo que la relación avivó rumores y comprometió su posición como jefe de Oxfam en el país caribeño.