El secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete, se reunió ayer con el gobernador interino de Nuevo León, Manuel González, quien le pidió que no se retiren de la entidad militares que apoyan en las tareas de seguridad pública. La estrategia del gobierno federal es mantener a las fuerzas armadas en labores de seguridad pública, al tiempo que pone a prueba los alcances de los más de 43 mil policías federales, no sólo para aspectos operativos, sino de investigación y coordinación con el Ministerio Público. Al respecto, el funcionario dijo que la tarea es amplia porque la PGR tiene pendientes de cumplimentar alrededor de 20 mil órdenes de aprehensión en la esfera federal. Tan sólo en los puntos prioritarios, donde se puso en marcha la estrategia, hay 800. Al mismo tiempo se investiga la actuación de policías federales para dar con aquellos que están coludidos con criminales.