En México, alrededor de 10.8 millones de jóvenes son vulnerables por alguna carencia social, es decir, están en condiciones de rezago educativo, no cuentan con calidad y servicios de la vivienda, falta de acceso al sistema de salud, seguridad social y a la alimentación que garantice su bienestar, señaló Horacio Chavira, director de salud , Equidad y Servicios a Jóvenes del Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve). Durante su participación en la 23 Semana Nacional de Información contra el Alcoholismo Compartiendo Esfuerzos, Chavira habló sobre los retos en materia de salud y el ámbito laboral a los que debe enfrentarse este sector. Expresó que la juventud presenta grandes desafíos en las seis dimensiones mencionadas, que evidentemente en el tema de alcoholismo y consumo de sustancias prohibidas les implica cuestiones sociales, económicas y culturales.