Se fortalecen ventas de maquinaria y tecnología de última generación
Desempeño favorablede la industria manufacturera en 2017, destaca la AMT
Lunes 15 de enero de 2018, p. 21
Pese a la incertidumbre económica que México experimentó en el primer año de gobierno de Donald Trump, en Estados Unidos, no se desaceleraron las ventas de la maquinaria y tecnología de última generación que cada vez más se utiliza para procesos automatizados y robotizadosen México, aseguró Carlos Mortera, director para América Latina de la Asociación para la Tecnología Manufacturera (AMT, por sus siglas en inglés).
Sólo en el primer trimestre de 2017 hubo incertidumbre, pero después el consumo se robusteció y hubo desempeño favorable en la industria manufacturera, desde la automotriz hasta el resto de la cadena de transformación
, dijo. Para 2018 el pronóstico es positivo por un aumento en la demanda de bienes y servicios a escala mundial.
México importó 12 mil millones de dólares en tecnología para la manufactura entre 2012 y 2017, y la inversión acumulada para procesos automatizados y robotizados en la industria mexicana ascendió a 2 mil millones de dólares en el mismo periodo, lo que ha fortalecido la calidad y rentabilidad de los procesos productivos, refirió Mortera, en entrevista.
En 2017, el consumo de maquinaria cerró en cerca de 2 mil millones de dólares.
Consideró que gran parte de la fortaleza manufacturera de México ha sido importar las mejores soluciones
de ciencia y tecnología desarrollada por otros países, pues resulta más barato que generarlas aquí.
Las industrias eléctrica, de electrónica y automotriz son las que más consumen tales insumos, y Mortera desestimó que con ello se desplace mano de obra. Al contrario, sostuvo que tanto los procesos automatizados como los robotizados se complementan
con la mano de obra, pero aclaró que ésta experimenta un proceso de recertificación
.
Dijo que las oportunidades de empleo, existen, pero no están siendo cubiertas”. Refirió que en Estados Unidos hay 300 mil empleos manufactureros vacantes, pero no dio una cifra al respecto sobre México.
“No hay desplazamiento de la mano de obra, hay escasez de talento. En el pasado, las operaciones tradicionales eran con maquinaria convencional, pero en la actualidad, al incluir computación y automatización en los procesos productivos se dan nuevas corrientes de certificación que generan más valor agregado de los operadores y trabajadores en México.
Hay una estadística favorable al respecto y hablando con los industriales de México hay mucho enriquecimiento y necesidad de mano de obra especializada y la AMT, entre otras organizaciones, trabaja en toda esta certificación, automatización y robótica, en entender mejor la industria 4.0
, detalló.
Tanto en las importaciones de maquinaria y herramienta de última generación como en la inversión para los procesos automatizados, Estados Unidos se mantiene como el principal país, seguido de países de Europa y Japón. El flujos no ha sido afectado, insistió, porque además desde hace más de 12 años se carece de aranceles en productos importados por la industria de la transformación, de los cuales 40 por ciento son para el sector automotriz.
Incluso aseguró que las importaciones de tecnología o maquinaria se mantendrían sin gravamen si finaliza el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero en las exportaciones que México haga el promedio sería de 4 por ciento en el arancel y puede absorberse con iniciativas para mejorar la productividad e inversión en soluciones de alto valor tecnológico.
No obstante, comentó que una eventual disminución en las importaciones de maquinaria o tecnología podría darse por la incertidumbre que se genere en las cadenas productivas si no hay TLCAN, aunque consideró que sería temporal, como ocurrió a finales de 2016 cuando Trump asumió el poder.
La demanda por innovaciones se ha notado en la Expo Manufactura que la AMT ha realizado durante 22 años en Monterrey –la próxima será del 6 al 8 de febrero–, pues Mortera refirió que en 2013 instalaron un pabellón especializado en automatización y robótica, y desde hace tres años otro para la llamada manufactura aditiva
, referida a la impresión digital tridimensional que se utiliza en diferentes ramas industriales, como la automotriz, aeroespacial y biomédica.