Miércoles 27 de diciembre de 2017, p. 18
El alto índice de conectividad que existe hoy es un beneficio para los usuarios, pero también implica un alto riesgo, sobre todos, para niños y adolescentes, considerados nativos digitales, ya que al menos 40 por ciento de ellos han aportado datos personales propios o de sus familiares en redes sociales, revelaron sondeos de la empresa de ciberseguridad Kaspersky Lab.
La compañía destacó que a pesar de que son conocidos los riesgos que afrontan los menores al usar algún tipo de red social o tecnología de la información, 56 por ciento de los padres les regalan teléfonos inteligentes, aunque su intención es la de estar siempre en contacto con sus hijos.
Señaló que según sondeos entre sus clientes en la región de Latinoamérica, 31 por ciento de los menores usuarios de teléfonos inteligentes han hecho alguna transacción financiera mediante Internet y les gustaría volver a hacerlo.
El 57 por ciento utiliza su verdadero nombre en línea, 47 informa su edad real y 40 por ciento comparte a qué escuela va. Esos pequeños datos crean perfiles que son de interés para los ciberdelincuentes, lo que les permite secuestrar, suplantar o acosar a los niños
, advirtió la empresa.
Dicen dónde viven y cuánto ganan sus padres
Los chicos que desconocen los riesgos y medidas de ciberseguridad van más allá e incluso se detectó que 14 por ciento especifica dónde vive, y 11 menciona los ingresos de sus padres, con lo que aportan todos los ingredientes para ser una víctima potencial de los ciberdelincuentes
, señaló Kaspersky.
En el sondeo Crecer Online realizado por Kaspersky, la empresa econtró que 44 por ciento de los menores de entre ocho y 16 años se encuentra constantemente en línea, y 73 por ciento de adolescentes entre 14 y 16 años “no imagina su vida sin un smartphone”.
La compañía recomendó como medidas de seguridad para todos los menores que usan un teléfonos inteligentes o cualquier otro dispositivo, filtrar el contenido de Google Play para impedir que los menores descarguen juegos para adultos o canciones con letras explícitas mediante los controles parentales de Google Play.
Para prevenir el uso de Internet sin supervisión y controlar mejor el uso de datos del operador, sugirió desactivar el uso de datos móviles desde los ajustes del smartphone del menor y mediante las opciones del proveedor de servicios móviles. Después, configurar el acceso a tu red WiFi doméstica. Así como limitar el tiempo y el contenido mediante herramientas que ofrece la propia empresa, que incluyen localización y redes sociales.