Se mantendrá un sólido impulso debido a la perspectiva positiva de la inversión, indicó
Llegará a 3.3%, gracias a mejoría general en mercados emergentes y países más desarrollados
Martes 26 de diciembre de 2017, p. 17
La economía mundial crecerá en 2018 a mayor ritmo desde 2010, de acuerdo con las previsiones de la agencia calificadora internacional Fitch Ratings. El impulso del crecimiento mundial sigue siendo sólido y es probable que se mantenga gracias a una perspectiva cada vez más positiva de la inversión.
La firma financiera global señaló que el crecimiento mundial se estima en 3.2 por ciento este año y por los indicios de que 2018 será igualmente robusto, el crecimiento llegará a 3.3 por ciento el próximo año, gracias también a la mejoría generalizada en los mercados emergentes y los países más desarrollados.
En su reporte sobre las perspectivas de las economías avanzadas, Brian Coulton, economista en jefe de Fitch Ratings, señaló que el crecimiento de la demanda se está recuperando con fuerza en las más grandes economías emergentes, como Brasil y Rusia. Luego de sufrir caídas de la demanda agregada como consecuencia del derrumbe de los precios de las materias primas en 2014, ahora hay espacio para que la demanda se recupere.
Las políticas macro y los mercados laborales ajustados están apoyando el crecimiento de la demanda en países desarrollados, mientras el repunte del sector de vivienda de China desde 2015 y la recuperación de los precios de las materias primas apuntalan el consumo en mercados emergentes
, consideró Coulton.
En sus proyecciones para 2018, Fitch consideró que el impulso para el crecimiento mundial probablemente se mantendrá durante los próximos 12 meses, debido a una perspectiva cada vez más positiva para la inversión
.
La agencia calificadora indicó además que espera que la economía global repunte este año hasta arrojar un crecimiento de 2.9 por ciento, en gran parte por la revisión al alza de las proyecciones de expansión de la zona euro, de 0.3 por ciento a 2.0 por ciento.
Explicó que es probable que el crecimiento de la zona euro se mantenga a tasas superiores durante 2018, en tanto que la desaceleración de la economía de China será limitada, de acuerdo con la calificadora.
Pese al progreso del panorama global implicará cambios en las políticas monetarias de los grandes bancos centrales, dijo la agencia. El banco central de China recientemente ha subido las tasas de interés, lo que comenzará a impactar su crecimiento económico hacia fin de año, mientras la Reserva Federal parece dispuesta a seguir con sus planes de normalización de tasas a un ritmo de tres a cuatro subidas por año hasta 2019.
En tanto, y por la baja inflación subyacente, el Banco Central Europeo (BCE) puede seguir con sus estímulos monetarios por el momento, pero el menor riesgo de deflación lo llevará a empezar a retirar el programa a mediados de 2018, estimó Fitch.
Afirmó que el panorama positivo para la economía se explica por la carencia de inflación global frente al crecimiento, lo que permite que políticas monetarias acomodaticias o de bajas tasas de interés coexistan con repuntes en el mismo. Sin embargo, se debe tener precaución sobre cuánto tiempo puede persistir esta combinación. Más allá de 2018, parece que es muy probable que el crecimiento global se modere, mientras las condiciones de política monetaria se ajustarán
, explicó Coulton.
El análisis indicó que en las economías avanzadas las condiciones financieras siguen siendo muy favorables: los desafíos de los ajustes en la política fiscal se han desvanecido y el ciclo de la inversión adquiere solidez. Asimismo, el bajo desempleo refuerza la confianza del consumidor.
En Estados Unidos, el crecimiento económico será impulsado además por los recortes de impuestos a las corporaciones y la aceleración de la inversión privada. En ese sentido, Fitch ajustó al alza su proyección de crecimiento para ese país de 1.8 a 2.2 por ciento en 2018.
La Fed ha señalado que el estímulo monetario empezará a reducirse más tarde este año, y estos ajustes podrían provocar cierta volatilidad en los mercados financieros globales por una política que ha sido persistentemente expansiva, advirtió Coulton. Más allá de 2018, sin embargo, la economía puede enfrentarse a vientos en contra, alertó Fitch Ratings. Entre los nuevos factores sobresale que el crecimiento actual en las economías avanzadas está muy por encima del potencial
.
En consecuencia, las brechas de producción se cierran rápidamente, lo que se corrobora por la baja en las tasas de desempleo.
Las previsiones de Fitch apuntan a que las brechas de producción estarán en territorio positivo en todos los países avanzados, excepto en el Reino Unido para 2019. Incluso teniendo en cuenta la incertidumbre en las estimaciones en tiempo real de las brechas de producción, esto provocará un cambio en las actitudes de bancos centrales hacia la política monetaria
, afirmó la calificadora.
Asimismo, el potencial de mayor crecimiento, especialmente si el ciclo de inversión privada se acelera bruscamente o si la política fiscal se relaja rápidamente, inevitablemente traería consigo un riesgo elevado de un ajuste más rápido de la política monetaria.
Este es un riesgo que podría ocurrir incluso sin un crecimiento más fuerte. Las bajas tasas de desempleo y el aumento de los informes anecdóticos de escasez de mano de obra podrían dar lugar a un repunte más rápido de lo esperado en la inflación salarial
, advirtió la calificadora de valores.