El delito no es investigado de forma sistemática y ha bajado el número de condenas
Miércoles 20 de diciembre de 2017, p. 13
Los fiscales de México no han logrado castigar sistemáticamente a quienes lavan dinero y las autoridades tributarias son muy laxas con potenciales focos de dinero sucio, como las firmas de bienes raíces y de productos de lujo, según el borrador de un informe sobre la lucha del país contra las finanzas ilícitas.
El reporte del Grupo de Acción Financiera contra el Blanqueo de Capitales (Gafi), un ente intergubernamental creado para definir los estándares de lucha contra el financiamiento ilícito, subraya los pequeños logros de los fiscales mexicanos en el combate a las enormes redes financieras de narcotraficantes y funcionarios corruptos.
México ha disminuido la cantidad de condenas, según el reporte. El país latinoamericano ya estaba detrás de Colombia y Brasil, que han avanzado en la creación de fiscales independientes. El lavado de dinero no es investigado y perseguido de manera sistemática y proactiva
, señala el borrador, cuya publicación está prevista para principios de enero.
Orden en el sector bancario
México es la mayor fuente de drogas ilegales para Estados Unidos y las autoridades de ambos países han recibido críticas de organizaciones civiles por dejar las finanzas de estos grupos delictivos en gran parte intactas.
El informe de más de 200 páginas elogia los esfuerzos para poner orden en el sector bancario mexicano luego de que investigaciones de Estados Unidos –a mediados de la década de 2000– mostraron que instituciones bancarias mundiales procesaron miles de millones de dólares en efectivo del narcotráfico. Funcionarios mexicanos dicen que regulaciones más estrictas eliminaron mucho dinero ilícito del sistema bancario.
Sin embargo, el reporte de Gafi dice que las autoridades tributarias mexicanas no hicieron lo suficiente para vigilar negocios claves fuera del sector financiero que son utilizados para lavar dinero, como el inmobiliario.
Desde 2014, el Servicio de Administración Tributaria ha tenido poderes para auditar a más de 64 mil empresas consideradas de alto riesgo, pero sólo asignó 16 funcionarios para investigarlas. Desde 2014 han auditado 118 firmas y profesionales, menos de 0.2 por ciento, añade el borrador.
La falta de un registro nacional de accionistas ha hecho más difícil a las autoridades seguir las rutas del dinero usadas por bandas de narcotraficantes y funcionarios corruptos para ocultar fondos mal habidos, de acuerdo con el borrador del reporte, elaborado en reuniones a puertas cerradas en Buenos Aires el mes pasado.
Un borrador anterior –preparado por un equipo de funcionarios liderado por el Fondo Monetario Internacional (FMI)– fue más duro, de acuerdo con dos fuentes familiarizadas con el tema. Ese documento anterior señaló pobre coordinación entre funcionarios financieros, fiscales y fuerzas de seguridad en México, y débil cooperación con Estados Unidos, indicaron las fuentes. No obstante, funcionarios mexicanos convencieron a asesores de bajar el tono del informe.
Durante las reuniones en Argentina, el gobierno mexicano expresó en un comunicado que el informe identificó áreas de mejora en la lucha contra el dinero sucio, pero afirma que existe buena coordinación entre autoridades y extensa cooperación internacional
.
México ha tenido pocos avances en la confiscación de dinero ilícito, según propias estimaciones del gobierno. Datos en un informe proporcionado por México muestran que incautó sólo 32.5 millones de dólares en 2016. Eso representa menos de 0.1 por ciento de 58 mil 500 millones de dólares en ganancias ilícitas que el gobierno calcula son generadas anualmente por el crimen organizado.
Además, se han realizado menos investigaciones que en años anteriores, según información de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la SHCP. Crear una UIF sofisticada que se enfoque en grandes operaciones es más efectivo para combatir eficazmente el lavado de dinero que basarse en los casos que surgen de operaciones policiacas o aduanales de rutina.
Sin embargo, sólo 8 por ciento de las investigaciones en México se basaron el año pasado en informes de la UIF, según el reporte de Gafi. Eso está por debajo del promedio de alrededor de 15 por ciento que tenía el país en años recientes.