Sábado 16 de diciembre de 2017, p. 11
El PRI cedió más espacios a los partidos con los que irá en coalición en 2018, Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza (NA), respecto a lo que aceptó negociar con el primero en 2012; lo que da a sus socios, básicamente, son distritos y entidades muy competidas ante la oposición y algunas en las que el triunfo es poco probable.
No obstante, el PVEM refrenda el control en Chiapas, donde postulará a candidatos de sus filas para el Senado y en la mayoría de distritos de esa entidad. En tanto, NA –mejor conocido como Panal– lleva mano para la senaduría de Morelos y Zacatecas,
Hace seis años el PRI contendió a nivel federal asociado con el PVEM, su alianza se denominó Compromiso por México.
En este año, bajo el título del bloque Meade, ciudadano por México, compartió candidaturas senatoriales en 10 entidades y ahora, ya con NA, sometió a reparto 16, en la titularidad o suplencias.
En cuanto a diputados, en 2006 metió al convenio 199 distritos electorales (de 300 en los que está dividido el país), pero sólo para postular candidatos del Verde en 43. Ahora, para la contienda del año próximo, fueron incluidos para la posibilidad de abanderar candidatos distintos al PRI en 133.
Así, el Verde tiene prioridad e cuatro senadurías de primera fórmula: Campeche, Colima, Chiapas y Oaxaca, y en tres de segunda fórmula: Chiapas, Yucatán y Zacatecas.
En tanto, NA es propietario en Morelos y Quintana Roo (primera fórmula) y en Campeche e Hidalgo, en segunda.
Si tiene éxito en sus postulaciones al Senado, Nueva Aliana podría alcanzar lo mínimo indispensable para formar por fin su propia bancada.