Un integrante de la junta de gobierno propuso elevarla medio punto; preocupa inflación
Incrementará el costo del financiamiento de las empresas y de las tarjetas de crédito, advierten
Viernes 15 de diciembre de 2017, p. 22
En un momento en que la economía mexicana afronta un entorno complicado, que se expresa en una contracción de la actividad en el tercer trimestre y en el que el panorama para la inflación se ha tornado más complejo
, el Banco de México (BdeM) decidió este viernes incrementar la tasa de interés de referencia en un cuarto de punto porcentual, para situarla en 7.25 por ciento, el nivel más elevado desde marzo de 2009.
La decisión del banco central, que tiende a incrementar el costo del financiamiento de las empresas y en ese sentido limitar la actividad económica, reflejó preocupación por el desempeño de la inflación, de acuerdo con analistas. El BdeM mostró, con la decisión de elevar la tasa, preocupación por el desempeño de la inflación y destacó los riesgos en la variable por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la reforma fiscal en Estados Unidos, las elecciones en México y presiones en precios de productos agropecuarios y energéticos
, comentó Mariana Ramírez, analista de Ve por Más.
La decisión de la junta de gobierno anunciada este jueves fue la primera en la que el órgano colegiado fue encabezado por Alejandro Díaz de León, gobernador del banco central desde el primero de diciembre pasado.
En el comunicado, el banco central expresó que en el tercer trimestre de este año la economía mexicana se contrajo, como resultado de una desaceleración en algunos componentes del gasto en consumo e inversión desde finales de 2016, así como por el efecto temporal en la actividad económica por los sismos de septiembre y la caída en la producción de petróleo.
El órgano colegiado consideró que el balance de riesgos para el crecimiento sigue sesgado a la baja, debido principalmente a la incertidumbre en torno a la renegociación del TLCAN, que ha afectado considerablemente
la inversión y posiblemente
es una de las causas de la desaceleración del consumo.
El Banco de México también anticipa una mayor inflación a la esperada hasta ahora, no sólo por el alza en el precio del gas LP –de uso doméstico– y en algunas frutas y verduras, sino también por el incremento a los salarios mínimos que entró en vigor este mes. En noviembre, la inflación fue de 6.63 por ciento.
El panorama para la inflación se ha tornado más complejo. En particular, desde el tercer trimestre de este año se registraron presiones sobre la cotización de la moneda nacional, asociada a diversos factores, especialmente las renegociaciones del TLCAN y la normalización de la política monetaria en Estados Unidos
, dijo.
Con la decisión de este jueves, el Banco de México actuó en sincronía con el Banco de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, que la víspera también incrementó en un cuarto de punto sus réditos, a 1.50 por ciento. Con ello, mantiene el mismo diferencial entre los dos países y así conserva el premio a los inversionistas extranjeros con recursos en bonos de deuda gubernamental en el mercado local.
El incremento en la tasa de interés de referencia tiene efecto en el costo que pagan las personas por el uso de tarjetas de crédito y en las deudas contraídas por empresas con la banca –ambas con interés a tasa variable. En cambio, no afectan los intereses pagados por créditos hipotecarios, de nómina, personales y automotrices, que son contratados a tasa fija. Al encarecer el costo del crédito, tiene un efecto en la actividad económica.
La decisión de elevar la tasa de interés en un cuarto de punto no fue tomada por la junta de gobierno del banco central de manera unánime, pues uno de sus miembros planteaba un incremento de medio punto, según el comunicado emitido ayer.