La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) elevó en un cuarto de punto porcentual la tasa de interés de referencia, a un margen de entre 1.25 y 1.50 por ciento, como anticipaban los mercados y mantuvo sin cambios su pronóstico de alzas de los tipos para los próximos años, pese a que los funcionarios del banco central anticiparon un crecimiento más sólido de la economía en el corto plazo. La decisión, en la reunión final de política monetaria de 2017 y tras una serie de datos económicos relativamente alentadores, va en línea con el objetivo de aplicar un endurecimiento gradual de la política monetaria. La Fed ha elevado su tasa de referencia tres veces este año y proyectó tres alzas más en 2018 y otras tres en 2019, antes de que se alcance un nivel de largo plazo de 2.8 por ciento. Este cambio destaca que el comité espera que el mercado laboral permanezca fuerte, con una creación sostenida de empleo, amplias oportunidades para los trabajadores y salarios en aumento, dijo la titular de la Fed, Janet Yellen, en su última conferencia.