Ubicado en la estadística con la tasa más alta de homicidios dolosos, Colima vive en paz y con tranquilidad, asegura su gobernador José Ignacio Peralta.

Vivimos preocupados porque estamos siendo testigos de una confrontación entre bandas delictivas que afortunadamente no altera la vida cotidiana de los colimenses, porque se trata, en el caso de los asesinatos, de hechos del fuero federal.

Entonces, y frente al argumento esgrimido por el gobierno federal respecto a que el repunte reciente en los índices de criminalidad ubicado sobre todo en hechos del fuero común (locales), el gobernador Peralta refuta ese aserto para el caso de su entidad: los delitos del fuero común como robo a casa habitación, a comercios, el asalto a transeúntes, etcétera, se han mantenido estables en Colima e incluso recientemente hemos logrado una tendencia a la baja. Y respecto a los homicidios dolosos del fuero común, están más abajo de los que se registraban a finales de la década de los 90.

Pero, insiste, “estamos viendo lamentablemente una confrontación entre bandas de la delincuencia organizada sobre todo por el narcomenudeo, el trasiego a través del puerto de Manzanillo y del acceso que se tiene con la frontera michoacana”.

Lamentó la inexistencia aún de la legislación sobre mando único y seguridad interior porque de tenerla, permitiría mejor condición para enfrentar el problema de la inseguridad.

Peralta fue entrevistado al término de la ceremonia en Los Pinos donde el presidente Enrique Peña Nieto firmó el decreto para la creación del Parque Nacional Revillagigedo.

Así, y frente a los datos donde Colima aparece en primer lugar en la estadística oficial como escenario del mayor número de asesinatos en el país, argumenta: en términos absolutos estamos en la posición número 15, pero no así en términos relativos pues el tamaño de la población total de la entidad nos lleva a un escandaloso primer lugar.

Es decir, plantea Peralta, dejar de medir la correlación en el número de homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes pues Colima es la entidad con menos habitantes en el país.

Buscar otro indicador, pide entonces, que nos genere una percepción correcta de lo que está pasando.