Chilpancingo, Gro.

Mujeres indígenas de los municipios de Tlapa y Acatepec apoyadas por el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan denunciaron las agresiones que sufrieron por parte de sus ex parejas y juzgados de esas demarcaciones, por lo que exigieron a los magistrados del Tribunal Superior de Justicia emitir resoluciones apegadas a la ley.

En rueda de prensa, en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, narraron las agresiones contra las indígenas de la Montaña Alta, donde por defender sus derechos fueron violadas, golpeadas, despojadas de bienes y en algunos casos les revirtieron la acusación en su contra.

Una colaboradora de Tlachinollan narró la historia de Florencia Sánchez Joaquín, asesinada a navajazos por su esposo Marcelino de la Cruz Sánchez y otras tres personas en agosto de 2014, en la comunidad Loma Tuza, municipio de Acatepec.

Esa vez, Florencia acudió al ayuntamiento a tramitar la pensión para sus dos hijos menores. De regreso se encontró con su ex pareja, quien la violó con otros sujetos, la apuñalaron y le rompieron el cráneo con un martillo.

Tres años después el ex esposo fue encarcelado en Tlapa; pero aún amenaza a los familiares de la difunta, pues tres compinches han hecho disparos con armas de fuego a la casa de la familia para amedrentarlos.

Elvia Méndez Castillo, de Tlapa, contó que en el 2013 fue agredida con una botella de vidrio por su esposo, en San Pedro Petlacala. Tenía cinco meses de haber tenido a mi hijo por cesárea y no le importó. El sujeto ebrio cayó al piso y se lesionó con los vidrios rotos. En diciembre de ese año se dictó sentencia condenatoria, ahora estoy acusada de lesiones por lo que le pasó a mi esposo, expresó Elvia. La juez de Tlapa argumentó que la mujer era más grande y gorda, por lo que la consideró la agresora. Yo lo demandé; pero el juez no me ayudó, dijo que yo lo había lastimado.

Juana Ramírez contó que tras 27 años de maltrato por su ex pareja Ambrosio Ramírez, quien la violó, lo dejó en 2013. El sujeto, con su nueva pareja, la despojó de su casa, la cual construyó cuando trabajaron en los campos de Sinaloa.

En Acapulco, la activista Silvia Galeana pidió a las autoridades instalar módulos de atención a la violencia de género y derechos humanos.