El mundo se estandariza a pasos agigantados, pero se muestra más complejo, y aunque se homogeneiza no se han reducido las diferencias económicas, éstas se han exacerbado, señaló José Sarukhán, coordinador nacional de la Comisión Nacional para el Uso y Conocimiento de la Biodiversidad (Conabio).

Durante la celebración del 25 aniversario de la Conabio –que empezó una hora después de lo programado por el retraso de Rafael Pacchiano, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales– se entregaron reconocimientos a la Fundación Carlos Slim, a la bióloga Julia Carabias, al Instituto de Biología de la UNAM y al fotógrafo Fulvio Eccardi, entre otros.

Sarukhán sostuvo que los datos de distribución desigual de la riqueza en el mundo hablan por sí mismos, a este escenario socioeconómico se le unen los efectos generados por el tipo de crecimiento económico global, el cual ha tenido impacto en los ecosistemas.

Hizo un recuento de cómo evolucionó en el país la información sobre la diversidad biológica hasta que en 1992 se creó la Conabio. La cual asumió la responsabilidad de poner a disposición de la sociedad esta información.

Sarukhán dijo que la Conabio –que sufrió severos recortes presupuestales en los dos años pasados– tiene 330 miembros y en cinco lustros ha apoyado 2 mil 500 proyectos con 930 millones de pesos, la tajada de león fue para la UNAM, en 18 dependencias recibió un apoyo de 175 millones de pesos. Al final, con voz entrecortada, dijo que la Conabio seguirá trabajando con la solidez que le caracteriza. Enseguida, recibió un nutrido aplauso.

En la celebración, realizada ayer por la noche en el Museo de Antropología, Sarukhán recibió los reconocimientos de Julia Carabias, primera secretaria de Medio Ambiente; del primer secretario ejecutivo de la Conabio, Jorge Soberón, y de Rafael Pacchiano.

En su participación, Carabias se refirió a que la Conabio surgió en el contexto de la Cumbre de la Tierra de 1992 y gracias a la autoridad moral de quien la dirige, José Sarukhán, ha sorteado tropiezos. Destacó que faltan amarres para que las recomendaciones de la Conabio sean una obligación para un funcionario y tengan un costo para quien no las asuma. La Conabio, dijo, ha estado sometida a crisis económicas pero lo ha superado.

Por su parte, Rafael Pacchiano, se refirió a logros de la Conabio en los últimos años, como el inventario nacional de manglares, que llevó a que se restauraran 7 mil hectáreas.