El caso de su hija sólo se investigará como feminicidio si aparece encuerada y violada. Esa fue la respuesta que las autoridades de Chimalhuacán, estado de México, dieron a Lidia Florencio Guerrero y su familia, cuando denunciaron el crimen contra Diana Velázquez Florencio, asesinada el 2 de julio de este año en ese municipio, en el que desde hace dos años se emitió la Alerta de Violencia de Género (AVG). En conferencia, familiares de la chica de 24 años de edad y colectivos feministas denunciaron que pese a que en 11 municipios de esa entidad existe la AVG, las autoridades no cumplen con los protocolos establecidos para garantizar la seguridad de las mujeres, lo que genera que la violencia y crímenes contra ellas sigan presentándose.

Señalaron que de acuerdo con cifras del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, en México son asesinadas al día por razón de género, siete mujeres, y cuatro de estos casos suceden en el estado de México. Lidia Florencio, madre de Diana, recordó que su hija salió de su domicilio a las 2 de la mañana del 2 de julio y no se supo más de ella. Presentaron la denuncia por desaparición ante el Ministerio Público de Chimalhuacán a las 5 de la tarde y, sin atender los protocolos de la AVG, la respuesta que fue seguro se había ido con el novio. Mientras el cuerpo sin vida de la chica se había encontrado 12 horas antes de la denuncia y fue llevado al forense de Texcoco, donde la familia la localizó cuatro días después.

La mujer denunció que no hay avances en las investigaciones ni compromiso de las autoridades para esclarecer el feminicidio. Sólo queremos justicia, pero nos dan largas y no vemos ningún avance.

En este contexto, Dulce María Andrea Ortega, de Nos Queremos Vivas Neza, detalló que este 25 de noviembre, en el contexto del Día Internacional contra la Violencia hacia la Mujer, diversas organizaciones y colectivos realizarán una marcha contra la impunidad y la violencia hacia este sector en Chimalhuacán, que iniciará en el palacio municipal a las 2 de la tarde.

Elsa Arista, de la Liga Mexicana de Defensa de los Derechos Humanos y quien acompaña a la familia, enfatizó que en el caso de Diana, como en el de muchas otras mujeres víctimas de violencia en esta entidad, las autoridades no aplican ni cumplen con los protocolos establecidos a partir de la AVG, que entre otras cosas obligan a realizar una búsqueda inmediata y a realizar las indagatorias con perspectiva de género.