Miércoles 22 de noviembre de 2017, p. a16
Londres. El Abierto de Australia 2018 colocará en las pistas un reloj para controlar de forma estricta el tiempo entre punto y punto, algo insólito en la historia del tenis, anunció el directorio que rige los cuatro torneos de Grand Slam. El Abierto de Australia se utilizará como un banco de pruebas para experimentar medidas con el fin de agilizar el juego. Además, a partir de 2019 se reducirá de 32 a 16 el número de cabezas de serie. La junta de los Grand Slam –Australia, Roland Garros, Wimbledon y Abierto de Estados Unidos– se reunió la semana pasada en Londres durante el Masters para debatir las medidas. Así, Australia será el primer torneo que incorpore un reloj en la cancha para que los tenistas no se tomen más tiempo del permitido. Según las reglas actuales, no pueden emplear más de 20 segundos entre punto y punto en los Grand Slam y 25 segundos en los torneos organizados por la Asociación de Tenistas Profesionales.