Consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) rechazaron un proyecto de protocolo para que los funcionarios de casilla permitan el sufragio de población transgénero sin que hayan cambiado su identidad en su credencial para votar.

En la Comisión Temporal para el fortalecimiento de la igualdad de género y no discriminación en la participación política, solo su presidenta, Dania Ravel, aceptó recomendar la emisión del documento tal como se formuló, mientras sus integrantes, Claudia Zavala, Benito Nacif y Jaime Rivera, se pronunciaron en contra por diversas causas.

El protocolo establecía que todas las personas trans podrán votar aun cuando no hayan realizado el trámite de rectificación de nombre y sexo en sus documentos oficiales, incluyendo la credencial de elector, así como aquellas cuya expresión de género no coincida con la fotografía de su mica con la información de nombre y sexo.

Para ello, recomienda al presidente de casilla preguntar al ciudadano, sin mencionar su nombre en voz alta: ¿es usted la persona titular de esta credencial para votar?, y si la respuesta es afirmativa, el elector podrá votar.

Nacif planteó que si se sigue ese procedimiento se puede poner en riesgo el principio de una persona, un voto, y abrir la puerta para la usurpación de la identidad.

Su postura generó críticas de activistas defensores de los derechos de las personas transgénero, que el lunes asistieron a la primera sesión de dicha comisión.

Puedo vestirme como me dé la gana; tengo ese derecho. No sé quién puede travestir una huella digital, expresó Gloria Davenport, y acusó a Nacif –quien en ese momento ya no estaba presente– de criminalizar a las personas trans y de desconocer lo complejo que es rectificar un acta de nacimiento.

El martes se reanudó la sesión y la consejera Pamela San Martín defendió el uso de este protocolo, ya que sólo en Ciudad de México, Nayarit y Michoacán los ciudadanos trans pueden modificar sus actas de nacimiento.

Aquí se puede hacer el cambio sin bronca, pero si se va a otra entidad de la República, el gran problema es que para poder hacer la modificación de acta de nacimiento es que deben obtener un amparo, refirió San Martín.

El consejero Jaime Rivera se opuso a que se proteja de la discriminación a un segmento, incurriendo en un trato privilegiado o excluyente para los demás, preguntando a todos si las credenciales les pertenecen.

Zavala coincidió en que es necesario un protocolo, pero se manifestó en favor de hacer más consultas a los especialistas y técnicos.

El tema volverá a discutirse en las comisiones unidas de Organización, así como de Capacitación Electoral y Educación Cívica, pero el tiempo se acorta, porque deberá estar aprobado el primero de diciembre.