Edgardo Codesal aseveró que la Federación Mexicana de Futbol debe respaldar a la Comisión de Arbitraje, encabezada por Arturo Brizio, para detener a los líderes de la Asociación Mexicana de Arbitraje que se sienten intocables al grado de no aprobar la pruebas físicas y amenazar con realizar un paro en la Liga MX.

Arturo Brizio está llegando y tiene lidiar con esta gente que está enquistada. Con este tipo de cosas se dará cuenta de cuál es el problema. No es fácil el cambio cuando un grupo ha tomado y atemorizado el futbol mexicano. La Federación Mexicana de Futbol tiene que poner las cartas claras y firmes a través de la Comisión de Arbitraje, dijo.

El mundo del arbitraje desató polémica después de que se dio a conocer que Roberto García Orozco, Paul Delgadillo y Francisco Chacón, cabecillas de la Asociación Mexicana de Arbitraje, no terminaron las pruebas físicas que realizó esta semana la Comisión de Arbitraje cara a la liguilla del Torneo Apertura 2017, al tiempo que expresaron su molestia por este tipo de exámenes.

Codesal apuntó que este grupo siempre hace la misma jugarreta porque abandonan las pruebas diciendo que están cansados para no ser reprobados, y así sólo se les marque que no terminaron las pruebas para que puedan realizarlas en el momento que ellos decidan. Estos tres individuos que manipulan la AMA creen que tienen privilegios y eso no puede ser, sostuvo.

Indicó que después del paro de actividades que realizaron los silbantes en marzo, los líderes de la AMA se empoderaron ya que se les permitió hacer lo que se les antojara y ahora se deben enfrentrar las consecuencias.

La comisión tiene que tomar medidas, pero con apoyo de la federación, la cual debe de salir de frente a respaldar a Brizio y exigirle a los árbitros que entrenen, sostuvo.

El que no quiera entrenar que se vaya !Fuera! No pueden tomar el futbol como rehén, el balompié mexicano es mucho más que cuatro árbitros, tiene una gran trayectoria, expresó.

Añadió que, con el bono anual, los ábitros tienen un sueldo base que llega a los 50 mil pesos al mes, al que considero justo siempre y cuando cumplan con las exigencias de los entrenamientos.